Tras el óptimo 2018 de Globalia con un beneficio “histórico” de 48 millones, el grupo turístico afincado en Mallorca ha logrado recuperar el dividendo, paralizado desde 2015, y con ello, retribuir a sus accionistas con seis millones de euros (Globalia: beneficio “histórico” en 2018 hasta los 48 millones).
Con todo, el grupo asegura que ese dividendo corresponde al ejercicio 2017 y que el pago a los accionistas, con cargo al beneficio de 2018, será incluso mayor toda vez que el beneficio neto se triplicó en los siguientes doce meses, publica Cinco Días.
Este retraso es justificado por el hecho de la dificultad técnica para consolidar los resultados de todas las filiales junto a los de la matriz, explica el citado medio. Eso provocará, por lo tanto, que el dividendo con cargo a los resultados de 2018 se aprobará con toda seguridad cuando se presenten las cuentas de 2019 (Globalia: su deuda alcanzó los 235 millones en 2018).
En los diez años que han transcurrido desde el estallido de la crisis en 2008, el grupo presidido por Juan José Hidalgo solo ha repartido dividendo en dos ejercicios. En 2011 aprobó la distribución de seis millones entre sus accionistas con cargo a los resultados de 2010, cuando obtuvo un beneficio de 19,4 millones de euros. En 2015 volvió a repartir seis millones de euros, con cargo al ejercicio anterior tras ganar 27,6 millones.
Globalia encadena dos años seguidos en positivo tras las pérdidas de 17,8 millones de 2016. Por su parte, el resultado bruto de explotación (ebitda) alcanzó los 166,8 millones de euros, el 63 % más que en el ejercicio precedente, según datos de la compañía.
Escuchas eso,..., es el silencio.
No
Empresa de negreros y de explotadores. Son tan ridículos que aplican sanciones brutales como despidos a sus empleados por errores que deberían ser calificados como leves, pero es lo que tiene tener gestores ridículos, incapaces y explotadores
A ver si revienta algún día y se va a la mierda y desaparece del sector turístico español. Aplicar la política de paleto lleva a que se mueran clientes en un hotel por no tener el mantenimiento adecuado y que un cable pelado pueda contactar con una piscina.