Richard Holden, a la derecha de la foto, vicepresidente de gestión de productos en Google, la primera tecnológica del mundo, estuvo el miercoles en la conferencia Phocuswright, en Los Angeles, que creó y dirige Philip Wolf, a la izquierda. Holden tuvo una intervención exclusivamente dedicada al turismo, más precisamente a la reserva de hoteles, llena de información sobre cómo será el futuro de este negocio. Incluso deberíamos decir cómo es el presente, al que sólo o principalmente ha llegado Google (Amazon y Apple también están en esta carrera).
El gran anuncio del miércoles fue que el futuro de las reservas será oral: la gente hablará con su teléfono, con su Alexa o con cualquier otro dispositivo y automáticamente se procesará la reserva. Ya hoy, un 20 por ciento de todo el tráfico que tiene Google en los móviles, a su vez el 50 por ciento del total, se hace por voz, usando la aplicación Google Assistant.
Por lo tanto, así se reservarán los hoteles. Pero, no se preocupen, Holden ha confirmado nuevamente que Google no piensa convertirse en un OTA, por más que siga perfeccionando su tecnología en este sentido.
“La voz impresiona”, dijo Holden. “Hoy ya tenemos un 20 por ciento de la comunicación móvil en voz, y crece a toda velocidad.” Normalmente hoy se usa el móvil para la voz, pero se pueden utilizar muchos otros aparatos. “Para los viajes –explicó el responsable de producto de Google– nosotros estamos trabajando el móvil, porque creemos que una pantalla es un complemento importante para entender la información que el consumidor recibe del proveedor.” A lo que añadió que hoy su aplicación está disponible en unos 500 millones de aparatos.
Holden negó por enésima vez que quieran convertirse en un a OTA, aunque podría hacerlo sin más. “Nosotros queremos crear valor. No queremos entrar en el negocio de las OTAs. Queremos llevar a los clientes a las OTAs. Nos estamos centrando en la aplicación Book en Google (Reserve en Google) para conducir a nuestros socios. Nosotros pensamos que es un tema de facilitar”.
El argumento parece extraño, pero quédense con la idea de hablar con su móvil, pedirle un billete y hotel para un destino, y obtener en la pantalla de móvil la respuesta inmediata. Este, dice Google, es el futuro de las reservas y de los viajes. Y lo dice en noviembre de 2018.
Igual que con WhatsApp y los chatbot y con lo mal que escribe la gente y habla vaya lío que van a tener . Y mientras base a explicará Alexis que tú diciste una cosa tu tarjeta de crédito estará fundida.
No estoy de acuerdo. Voz sin imagen no triunfará. Se están empeñando....lo he oído ya 2 anos, Expedia Summit, Amazon, Google. Pero el soporte imagen es fundamental. No hay una frase que dice..."una imagen vale más que mil palabras" pues eso!!
Una mañana cualquiera leeré en mi movil: Manolo, necesitas unas vacaciones, has ido cada dia a trabajar conduciendo una media de 47 minutos, y no has faltado ningun dia. No has hecho deporte. Te han caido muchos paquetes. Te recomiendo Tanzania, pero segun tu cuenta corriente no te lo puedes permitir, mejor un paquete Marsans a Dominicana. Será en AirEuropa ya que tienes 35000 millas, y por lo que se de tu familia y sus gustos, te recomiendo el Barcelo Bavaró. En el hotel tienes tu vinos preferidos, el novio secreto de tu hija tambien viaja a este hotel, hay una biblioteca para que tu hijo pueda estudiar ya que va a suspender, y tu mujer le encantará el mesero alto del tepanyaki ya que se parece al jardinero con el que te la pega.
jajajajaja!!! triste (futura) realidad. Echaremos de menos al agente de la agencia del barrio que tenia la misma información pero, como buen profesional, se la guardaba para la tertulia del bar
¿futuro? hablar con un agente virtual para solicitar un viaje.
Creo que esto ya existe, se llama agente de viajes y se encarga de todo lo que un viajero necesita : reserva de vuelos,hoteles,seguros ..... y ademas por el mismo precio incluye: asesoramiento y confianza.
Pero, tengo la sensación, de que los agentes de viajes molestamos, porque sino no entiendo ese ansía por quitarnos de en medio.
Una cosa que nunca tienen en cuenta estos fanáticos de hablarles a las máquinas, es que hay personas que tienen dificultades en el habla. Por ejemplo algo simple como no pronunciar bien la R, como es mi caso, con un operador te puedes hacer entender (por suerte no me encontrado con ninguno que ponga un poco de buena voluntad), con una maquina a la quinta vez que tienes que repetir te entran ganas de empezar a decir burradas o de estampar contra el el suelo o la pared el cacharro.
Además hay otro tema, por voz, salvo que el dispositivo que tu tienes también grabe, tu no tienes copia de lo que has dicho y nadie te garantiza al 100% que no se vaya a manipular la grabación, por escrito se supone que las 2 partes tienen copia de lo que ha dicho cada uno (ya me parece más complicado de manipular). Lo cual a mi tanto como cliente como vendedor me da más seguridad.