Investigan al director del AVE en la etapa de Ábalos

El director general de Construcción y de Adif-Alta Velocidad, Juan Pablo Villanueva, se encuentra en el punto de mira. Adif ha abierto una investigación interna por presuntas irregularidades a la hora favorecer a una empresa frente a otras en adjudicaciones públicas.

Según documentos a los que ha tenido acceso The Objective, el caso se remonta a la etapa de José Luis Ábalos al frente del Ministerio de Transportes entre 2019 y 2021. Directivos y empleados de Adif denunciaron que se había modificado al alza la puntuación a Obras Públicas y Regadíos (OPR) en su candidatura en tres expedientes: los accesos al puerto de Sagunto, el Ramal ferroviario del Bajo de la Cabezuela y el subtramo Amusco-Osorno.

En el caso de Bajo de la Cabezuela, las primeras pesquisas desvelan que la valoración técnica no fue firmada por la directora del proyecto, si no por su superior y el propio Villanueva. El citado medio apunta que se trata de un movimiento poco común, ya que el técnico es que el suele refrendar el proyecto al ser máximo responsable.

Los investigados niegan “categóricamente” las acusaciones. Tras el interrogatorio, se ha conocido que “los tres han colaborado con la investigación interna y afirman rotundamente que no existe ningún tipo de instrucción u orden dada o recibida que pudiera conllevar puntuaciones técnicas a favor de la empresa OPR -ni de ninguna otra empresa- en los expedientes referidos”.

Todas estas sospechas sacaron a la palestra que se podría haber utilizado el mismo modus operandi en los otros dos expedientes: puerto de Sagunto y Amusco-Osorno. En este último, OPR salió vencedora, y se hizo con la licitación por un importe de 86,3 millones de euros. El proyecto tampoco fue firmado por el director del proyecto.

Pese a encabezar la investigación, Adif apunta que es prácticamente imposible que hayan podido cometerse irregularidades, ya que la compañía implicada concursaba en UTE. “En el análisis de los expedientes han participado distintas subdirecciones del área de construcción, lo que nuevamente hace insostenible la idea que un solo equipo o dos o tres personas hayan podido determinar el sentido de las adjudicaciones”.