La matriz de VECI busca 2.000 millones de sus inmuebles para bajar deuda

El Corte Inglés quiere rebajar deuda y para ello está dispuesto a vender inmuebles para conseguir 2.000 millones. Para ello, el consejo de administración de la compañía ha dado el mandato a PWC con el objetivo de vender un bloque de activos que permita acelerar el proceso de desinversiones, informa El Confidencial.

Paralelamente, el pleno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado este jueves el proyecto de El Corte Inglés para alzar un nuevo centro comercial en el paseo de la Castellana, un mes después de que fuera rechazado el Plan Especial que habilita la construcción del inmueble. Los votos a favor de Ahora Madrid y el PSOE y la abstención de Ciudadanos y el PP, dejan sin efecto aquel acuerdo y dan definitivamente ‘luz verde’ al proyecto.

El Plan Especial se llevará a cabo sobre los terrenos que el grupo de distribución adquirió por 136 millones de euros a Adif en 2014, los cuales se ubican frente al centro comercial de la Castellana, su buque insignia en Nuevos Ministerios, y donde su agencia Viajes El Corte Inglés (VECI) goza de las oficinas más grandes con más de una veintena de empleados (VECI: agentes confían en ser reubicados si cierran centros).

En el momento de su adquisición, la parcela tenía asignada por el planeamiento urbanístico una edificabilidad lucrativa de 10.176 metros cuadrados sobre rasante de uso terciario, que permite tanto uso comercial como de oficinas, y 25.016 metros cuadrados bajo rasante (en principio, para aparcamiento). El centro comercial del Corte Inglés en Castellana ya cuenta con una superficie comercial y de servicios de 130.000 metros cuadrados, así como con más de 1.600 plazas de aparcamiento, recogen varios medios (El Corte Inglés, a punto de recibir ‘luz verde’ para su centro comercial más grande).

El desarrollo urbanístico fue aprobado en 2015, pero el Ayuntamiento de Madrid se vio obligado a replantear el Plan Especial tras la declaración de la Torre BBVA de Azca como Bien de Interés Cultural en 2017. De hecho, el futuro centro comercial deberá estar situado a al menos 36 metros de este edificio, dos veces su altura.