El gran lobby europeo de agencias de viajes (ECTAA) advierte de las nefastas consecuencias que traerá consigo la más que posible modificación de la Directiva de Viajes Combinados, que tras ser presentada por la Comisión Europea pasará ahora a ser debatida en el Parlamento Europea.
La organización se muestra especialmente preocupada por los cambios en materia de reembolsos debido a que la responsabilidad recaerá en las agencias de viajes. La propuesta es la siguiente: los intermediarios deberán devolver todo el dinero en caso de cancelación en un máximo de 14 días, mientras que los proveedores deberán hacer lo propio con las agencias en 7 días.
Para ECTAA, la nueva norma es “poco realista” y sus impulsores “ignoran los procesos existentes” debido a que los proveedores pocas veces cumplen con los plazos estipulados. “Cargaría a los intermediarios con obligaciones indebidas”, agrega.
En palabras de su presidente, Frank Oostdam, las regulaciones planteadas “son prácticamente imposibles de implementar”, y en caso de que así fuera se estaría “perjudicando a los canales de distribución indirecta en beneficio de los canales directos”, lo que “iría en contra de los consumidores”.
ECTAA también está preocupada por el manejo de los datos de los clientes y pide “medidas estrictas para evitar que los operadores de transporte hagan un uso indebido de la información confidencial de los clientes compartida por los intermediarios con fines comerciales”.
Y por último, pero no menos importante, se muestra contraria a la limitación de los anticipos: la Comisión Europea quiere acotarlos al 25% del importe total, no permitiendo cobrar el resto hasta 28 días antes de la salida del viaje combinado (El límite a los anticipos enciende las alarmas en las agencias).