El proceso de desunión que sufren las patronales de agencias españoles suscita la añoranza de cuando un dirigente como Rafael Gallego logró unir por primera vez a todo el gremio, y le dotó de una interlocución única y poderosa (Ruptura en el asociacionismo: hablan las patronales implicadas).
El canario supo conciliar los intereses de todas las voces que durante décadas fueron por libre para impulsar lo que primero fue Ceavyt, y que luego se convirtió en una plataforma que luchó contra los abusos sobre el eslabón más débil del turismo.
La unidad sectorial es la fórmula ideal para asegurarse el cumplimiento de unos mínimos de los intereses comunes, por encima de las prebendas personales que con frecuencia guían a quienes alientan la separación y los objetivos de máximos.
Rafael Gallego encabezó durante ocho años la primera gran patronal unitaria que tuvo España, y además de ganarse el cariño de la mayoría del sector por su simpatía, se apuntó un gran hito profesional que hoy genera añoranza.
Investigan por qué un A320 de Vueling aterrizó en una pista todavía en uso
Inteligencia Artificial: los cambios que afectarán al turismo
Treinta aerolíneas rusas, incapaces de sobrevivir un año más
Jet2 abre otra base con nueve vuelos a España
Momento clave en el mercado hotelero
Cargando ...
QRoo: alistan los primeros refugios ante tormenta tropical Sara
Cancún supera a Punta Cana y Los Cabos en preferencia para invierno
Dueña de Hotelbeds critica el daño de los visados para vender viajes
Cuba: temor turístico con Marco Rubio al elegirle Trump
Toda la razón el artículo.
El actual, con todo respeto, no tiene el carisma ni fuerza que el Sr. Gallego.
No tenemos que olvidarnos, por lo menos yo no lo olvido, que el Sr. Gallego, y gracias a él, se destapo el tema residentes.
Sufrió, y me consta, muchísimas presiones para que no siguiera con el tema.
Que desde cierto grupo turistico vertical integrado lleven un año enredando y propiciando la desunión de las agencias, desde luego no ayuda nada. Y hasta aquí puedo leer.
Rafael Gallego cuando era presidente de CEAV era un empresario canario independiente que se dedicaba a la defensa de las agencias y del sector en general. Ahora nos encontramos con que Carlos Garrido actual presidente de CEAV es directivo de Avoris y en UNAV, una de las May ores asociaciones algunos de sus socios principales son sus mayores competidores con lo cual cada uno arrima el ascua a su sardina pero ¿quien defiende los intereses de todas las agencias? NADIE... Y hasta que no se elija a un nuevo presidente de CEAV independiente se mantendrá esta guerra de intereses que tanto esta perjudicandon al sector.