Está claro que las directivas europeas nunca van a quedar al gusto de todos. Europa finalmente ha modificado la nueva directiva de viajes combinados para permitir anticipos por parte de los clientes, que espera la aprobación final por el Parlamento Europeo. Pero ahora las agencias, al menos las italianas, se quejan por un párrafo ciertamente ambiguo que dice que los proveedores podrán cancelar los viajes por “circunstancias excepcionales e imprevisibles” (El límite a los anticipos enciende las alarmas en las agencias).
Los interlocutores de la Comisión Europea, representantes de una lista de organizaciones de agentes de viajes europeos, entienden el sentido de este artículo, el 12, pero exigen más claridad porque con la redacción actual permite una interpretación muy subjetiva que dará pie a conflictividad.
Consideran las agencias que esto será un ámbito de confrontación y de disputas que únicamente dificultará el funcionamiento del sector.
Igualmente, los intermediarios presionan ahora a Europa para que se vuelvan a permitir los bonos, que son una herramienta que durante la pandemia se mostraron muy útiles para evitar el colapso de muchas empresas. Las agencias incluso creen que si los reembolsos siempre han de ser en efectivo, puede que los seguros sean casi imposibles.