Lufthansa y Accor, dos gigantes con iniciativas contra las agencias

Las agencias de viajes han recibido en los últimos días dos malas noticias. Por un lado, el anuncio del Grupo Lufthansa de cobrar 16 euros por cada reserva que se realice a través de los GDS, y, por otro, la decisión de Accor de crear una OTA que haga frente a Expedia o Booking.com. Ambas medidas suponen una amenaza para las cuentas de resultados de un sector al que la crisis ha obligado a autorregularse por la vía más dura, la desaparición de una parte de sus miembros, y que sufre de un mal endémico como es la atomización.

En el caso de Lufthansa, la fuerte reacción de las agencias no se hizo esperar y tras poco más de 48 horas desde el anuncio, asociaciones de los 28 países agrupados en torno la ECTAA mantenían una primera conferencia telefónica que se repetirá el próximo viernes como antesala a la reunión presencial que celebrarán la semana que viene en Bruselas.

De momento se desconocen las medidas que podrían adoptar para cerrar el paso a esta iniciativa, ya que, tal como han señalado a preferente.com fuentes de Fetave, lo prioritario ahora es conocer todos los antecedentes que han dado pie a esta situación y actuar “con prudencia” ante un anuncio que ya tuvo un antecedente fallido hace un par de años con American Airlines.

Para el presidente de Unav, José Luis Prieto, este movimiento de Lufthansa es “un error que a medio plazo no le reportará ni un céntimo de beneficio”, ya que salirse de la “relación natural prestatario de servicios / canal de distribución / cliente final es pan para hoy y hambre para mañana” tal como se ha visto en otros casos, por lo que a medio y largo plazo “tendrá que corregir su postura”.

Por el contrario, el anuncio de Accor de poner en marcha en su web un marketplace en su web dirigido a hoteles independientes y con comisiones inferiores a las grandes OTAs, no parece haber causado un gran revuelo entre el sector, aunque no sea de su agrado. Así, para el presidente de Unav, José Luis Prieto, se trata de una “iniciativa legítima”, ya que “todos los empresarios tenemos la obligación de tratar de innovar para poder seguir desarrollando nuestro negocio”.

La presidenta de Fetave, Mari Cruz Valdivielso, mantiene una postura parecida y, aunque no le gusta la iniciativa, a la que califica de “pan para hoy y hambre para mañana”, considera que lo que le da más “pena” de estos movimientos es que “no cuajen, porque si se hace de buena manera puede incluso beneficiar a los que llevamos muchos años en el sector”, ya que pueden contribuir a dar “estabilidad a un sector que se mueve en un entorno muy cambiante”.