Marga Terrasa, minorista jubilada: "El agente debe ser asesor y especializarse"

“Por fin me llegó el momento de la jubilación. Después de 47 años en el mundo del turismo  voy a ser yo la que viaje y disfrute de mi tiempo libre”. Con este mensaje en un correo electrónico enviado a sus contactos, la agente de viajes mallorquina Marga Terrasa (Palma, 1953) ha puesto punto final a una carrera que empezó como administrativa en la central de Viajes Barceló, junto a Carlos Monfort como director financiero, “llevando la contabilidad con un ordenador prehistórico (de la NCR Corporation)” y culminó creando su propia agencia en Palma, a inicio de los años noventa: Sirius Tours.

Su universidad del Turismo ha sido “trabajar con gente del Sector”, rodeaba de históricos de la industria, porque Marga lo que se dice “inventar” no inventó “nada” pero ha sabido “copiar y aprender mucho”, además de que fue directiva en la desaparecida Aedave y en Fetave.

Esta agente se fue con 21 años a Londres como ‘au pair’ para perfeccionar su inglés. Corría el año 1975. “Empecé como azafata de TAE por toda Europa”, en verano desde Mallorca y en invierno desde el archipiélago canario, volando en aeronaves “Caravelle y DC-8. Era la época de los chárter”. Una lesión en la espalda hizo que cambiase el avión por una oficina: “Llevábamos mucho peso con los ‘containers’ de bebida y comida a bordo”. Siguiente rumbo: Dusseldorf. “Había que aprender alemán, era el mercado que mandaba”, recuerda Marga, quien también habla francés.

GALMÉS, PIÑERO, HIDALGO

Siempre fue emprendedora e inquieta, y tras un tiempo en México D. F. regresó a España, para trabajar junto a Pedro Galmés en Mallorca, a inicios de los ochenta, “en una agencia donde me encargaba del receptivo de los primeros grupos de ciclistas que llegaban de Suiza, Finlandia (Helsinki) e Italia; “también chapurreaba italiano”. Galmés fue su primer mentor. “Si no me lo puedes solucionar, no te necesito”. Esa frase se la espetó aquel en una ocasión que le llamó por un inconveniente en una época en la que había ‘overbooking’ “de verdad y había que pasear a los turistas en autobús porque el hotel estaba lleno”. Marga “nunca” volvió a llamarle buscando soluciones.

De directivo histórico a otro que también lo ha sido: Pablo Piñero. Marga comenzó a trabajar en Soltour, “en sus inicios”, junto al fundador de Grupo Piñero. “Tenía muy claro lo que quería hacer, corría grandes riesgos y tiraba para adelante”.  En su impronta, junto a Piñero, recuerda también a Pepe Hidalgo, dos emprendedores “con dos personalidades distintas” a los que “no les han regalado nada”. “Venían de fuera del turismo y sabían para dónde ir, poniendo en riesgo su seguridad y su familia”, evoca con admiración.

Marga siguió rumbo como comercial en el antiguo Casino de Mallorca, donde contactaba a las agencias para que programaran el espectáculo del local. “Me gustaba el receptivo”, explica. Por ello, pasó a desempeñarse como agente ‘free lance’ enlazando hoteles con agencias. Entonces ya había llegado su momento, en 1991 fundó Sirius Tours.

¿Por qué ha estado esta agente casi cinco décadas en el negocio de viaje? “Porque me gusta viajar”, responde sin ambages. “Hay viajeros y turistas. El primero busca aventura –yo fui aventurera--; el segundo, cuando llega a una edad, organización”. Un consejo, sabido y en el que vale la pena incidir. “El agente tiene que ser asesor (internet no contesta; el receptivo es brutal tienes al cliente 24 horas, sin descanso), y ha de especializarse (con viajes a medida)”. La realidad del negocio minorista: “Nunca ha habido unión en el Sector; divide y vencerás”.

PREPAGO CON TOUROPERADORES

La mallorquina rememora 2007, cuando decidió dar un giro para salvaguardar su agencia de la inminente crisis. “Tras la apertura de los mercados ruso, búlgaro, rumano y báltico trabajaba con pequeños touroperadores”. Se percató de que cuando acababa el año el retraso de los pagos iba creciendo. Una vez finalizada la temporada, en octubre, “tenía que liquidar a los hoteles, mientras los TTOO no me pagaban hasta abril”, a lo que se sumaba que los guías oriundos de aquellos países se quedaban sin trabajo.

Tomó dos decisiones. Primera, les orientó para que se convirtieran en guías oficiales evitando esa carga laboral. Segunda, transcendental para afrontar la recesión y la bajada de la facturación de Sirius Tours: “Cerré el crédito a los touroperadores y me quedé con dos o tres que sí cumplían” (Touroperadores en prepago: ¿una solución para minoristas?).  De su hacer informó preferente.com. Y es que “el negocio está en cobrar, no en vender”, advierte. Aquellas mayoristas a las que Marga Terrasa les cortó el crédito “no aguantaron y dejaron descubiertos en otras agencias”.

Tras 27 años de actividad en Sirius Tours, una plantilla que llegó a sumar nueve personas entre agentes y guías, especializarse en grupos (senderismo, turismo enológico, de restauración, etc.), clientes de alto poder adquisitivo que buscan servicios exclusivos y viajes para empresas…, Marga Terrasa empieza otra etapa. “Me quedan muchas cosas por hacer”. Sirius Tours, perteneciente a Grupo GEA, cerró sus puertas el pasado 30 de junio. Marga Terrasa ha dicho adiós a la agente mientras le da la bienvenida a la viajera. Su correo sigue activo hasta septiembre, pero este verano 2018 quien lo va a disfrutar es ella.