Marsans, Lucas, los trabajadores, Pullmantur, Crisol y Mata

 

Marsans: se le acabó el chollo a más de un político de provincias

Cinco hoteleras canarias solicitan el concurso de acreedores de Marsans
 
Hidalgo: “Me duele, pero Marsans no sale de ésta”

La entrada del dueño de Tremón no acaba de cerrarse

Por Miquel Mesquida

Madrid. 13/05/10.- Desde el fin de semana pasado hay rumores —unos dicen que consistentes y otros que nada creíbles— acerca del retorno de José María Lucas a la dirección general de Viajes Marsans, al que todo el mundo ve como el único capaz de poner orden en una casa a punto de derrumbarse.

 

Que algo hay, es cierto, pero Lucas más que confirmar, calla, lo cual viniendo de él no quiere decir ni que sí que no, pues su negativa suele tener un sentido contrario y su afirmación el lado opuesto, tan listo como ladino y a la par que deseado por todos los trabajadores de Marsans.

 

Y es que los empleados de la agencia decana --si Don Enrique levantara la cabeza-- ven en Lucas a la única persona capacitada para timonear la zozobrante nave, pero con unos armadores que la han enmarañado tanto que poner orden de nuevo se antoja harto complicado.

 

Mientras los trabajadores ansían y añoran el retorno del indiscutido ejecutivo que situó a la división emisora en altas cotas de rentabilidad, Pullmantur ha descartado definitivamente quedarse con viajes Crisol a cambio de deuda, según ha sabido pref.com de fuentes bien informadas.

 

El empresario Antonio Mata, ex socio de Díaz Ferrán y Pascual Arias en Aerolíneas e impulsor de la quebrada Quantum, también habría estado analizando la posibilidad de quedarse con la agencia que en su día perteneciera a la familia Polanco, así como Marsans Portugal.

 

Mata, a quien el grupo le adeuda una fuerte suma de dinero, aunque la cantidad no es tan elevada como la que tienen con Pullmantur y otros proveedores de cruceros y cadenas hoteleras, también ha descartado Crisol y el negocio del país vecino.