Airbnb está buscando cerrar acuerdos fiscales con más de 500 ciudades de todo el mundo, similares a los 200 que ya tiene, para evitar así conflictos legales y mitigar el riesgo regulatorio que afronta la compañía en las distintas jurisdicciones.
El presidente de la compañía, Brian Chesky, explica en el Financial Times la importancia de llegar a este tipo de convenios para eliminar la incertidumbre a largo plazo: “Cuando existe un acuerdo fiscal, que supone un acuerdo explícito, no hay un riesgo existencial”.
Según recoge Okdiario, Airbnb ya ha cerrado acuerdos de este tipo con unas 200 ciudades que permiten a la empresa recaudar y remitir los impuestos a los gobiernos locales. La intención, según ha declarado Chesky, es ampliar el número hasta 700, lo que permitiría a la compañía esquivar gran parte de las batallas que la empresa tiene con las autoridades en distintos estados y ciudades.
Sin embargo, tal y como recuerda Expansión, llegar a un acuerdo fiscal no siempre soluciona todos los problemas regulatorios. En su ciudad de origen, San Francisco, Airbnb cobra y remite un impuesto de ocupación transitoria del 14% pero la compañía sigue inmersa en una lucha legal con la ciudad por las normas de registro de alojamientos.
Que falta hace en estos casos la transversalidad y buena coordinación entre varios ministerios. Lo solucionaría esto el tan reclamado de Turismo??
Este no es solo un tema de impuestos. Va mucho más allá y tiene que ver con la competencia desleal, la oferta de vivienda privada en las zonas turísticas, etc. etc.
Lo que hace falta de verdad es una ley como la de NY que regule o directamente prohíba el alquiler de apartamentos para cortas (casi siempre cortísimas en el caso de Airbnb) estancias
Los turistas que vayan a los hoteles, como siempre. Que dejen los pisos y las viviendas a los residentes. Estos últimos no tienen por qué sufrir los ruidos y los inconvenientes de los que están de vacaciones y tienen ganas de fiesta. El propietario del piso alquilado tiene los beneficios y los vecinos los perjuicios. Qué bien, no?
Tal parece que los términos que se refieren a falta de regulación y competencia desleal son los que rigen actualmente el flujo del turismo. Pocos se enriquecen y muchos que no tienen voz ni voto salen perjudicados.Lo peor es que es una tendencia mundial.