On the Beach, el turoperador online británico que ocupa el tercer lugar del ranking del país, ha admitido públicamente que las reservas para el verano son muy bajas, debido a las constantes variaciones en las políticas y normas sobre el Covid (On the Beach se lanza a por el ex cliente de Thomas Cook).
En la asamblea general de accionistas, la compañía dijo que el tráfico en la web, las reservas y el tiempo que los clientes pasan viendo productos han caído entre el 73 y el 85 por ciento en estos últimos meses.
La compañía está retirando del mercado todos los productos con salidas para antes de mayo, porque no parece que se vendan ni que vaya a ser posible comercializarlas.
Simon Cooper, el director general de On the Beach, comentó como motivo de la reunión de accionistas que “estos meses hemos visto desde una variedad de grados de restricciones en el país, seguido de una paralización total, la prohibición de los viajes de placer fuera del país y esto no podía menos que enseñar a los viajeros que reservar es problemático. Por eso esto ha tenido impacto en las ventas y creemos que las ventas van a seguir flojas durante un tiempo.”
La empresa añade que “en previsión de estos problemas, nosotros mantenemos una estrategia financiera conservadora que nos ha permitido no tener deudas.” En estos momentos, On the Beach tiene en caja 93 millones de libras, lo que cree que será suficiente para afrontar los meses que quedan. En Gran Bretaña, la extensión de las vacunas, que se aproxima ya a los once millones de inoculados, está dando alas a la idea de la recuperación.
Los británicos no viajarán al exterior hasta octubre. Las ventas para vacaciones en el Reino Unido están a niveles nunca visto.