Ouigo empieza a vender billetes para su nueva ruta entre Madrid y Valencia, que se estrenará el próximo 7 de octubre. La compañía, que mantendrá intacta su política de precios (billetes desde 9 euros), dispondrá de tres idas y vueltas cada día, es decir, seis trayectos entre ambas ciudades (Ouigo aplaza su llegada a Valencia hasta después del verano).
Ofertará un total de 21.378 plazas semanales en sus trenes Alstom Euroduplex de doble altura con capacidad para 509 personas. La nueva conexión se realizará desde la estación de Chamartín-Clara Campoamor. Además, contará con enlace directo con el norte de España, sin necesidad de cambiar de estación.
Hélène Valenzuela, directora general de Ouigo España, destaca que “hoy llega la verdadera bajada de precios que se anhelaba”. “Estábamos deseando poder ofrecer todos los beneficios de la liberalización a esta maravillosa ciudad, un destino con un inmenso valor cultural, gastronómico e histórico y con una gran oferta de ocio que ahora acercamos, aún más, al viajero nacional e internacional”, prosigue.
Tras el comienzo de operaciones a Valencia, la compañía se centrará en dar el salto a Albacete y Alicante. Este eje requiere diferentes homologaciones al contar con un sistema de seguridad diferente (ERTMS2) y, debido al retraso del inicio de operaciones desde Chamartín, se ha tenido que aplazar el inicio de operaciones a 2023. El servicio Madrid-Albacete-Alicante contará con dos frecuencias diarias, sumando cuatro trayectos en total al día.
En el año que Ouigo lleva operando en España, sólo en el eje entre Madrid y Barcelona, la compañía ha transportado a más de 2,2 millones de viajeros, con una tasa de ocupación del 97%.
Sra. Valenzuela, no sé equivoque y centrese en que la web de ventas sea ágil y funcione. En que el departamento de atención al cliente, atienda a sus pasajeros de manera honesta y profesional. Esto es lo prioritario y lo que demandan los viajeros del ferrocarril.
Y ya vera usted, como aunque sus precios sean más elevados, cada dia mejora la ocupación de sus trenes.
En una ocasión reclame a la Ferrovia estatal italiana, cuando me persone en la oficina de atención al cliente de la estación central de Milano, y pedi una hoja de reclamaciones, las dos señoras que habia leyendo revistas de cotilleo, se miraron la una a la otra y me contestaron que para que queria una hoja de reclamación si nadie me iba a contestar. Recuerdo que me dieron un libro que estaba casi sin estrenar y debia de haber dos o tres hojas escritas. A dia de hoy, unos quince años despues sigo esperando respuesta.
Cuando llego un nuevo operador, elegi sus nuevos y confortables trenes para viajar de Roma a Milan.
Hara un par de años, no me quedo más remedio que comprar un billete de la Ferrovia del Estado, para desplazarme de Riccione a Bolonia, un trayecto relarivamente corto. Llegamos con 15 minutos de retraso, cuando mire mi teléfono tenia dos mails, uno pidiendome disculpas por el retraso, otro ofreciendome un descuento para mi próximo viaje. Como cambian las cosas cuando se acaban los monopolios....!!