José María Ruiz-Mateos y Gerardo Díaz Ferrán tienen en común que crearon imperios empresariales de la nada, con múltiples sociedades y actividades, que quebraron casi en el mismo tiempo, y acabaron vendiendo sus firmas a Ángel de Cabo. Y pese a ello, a pesar de los vaivenes en los tribunales y la cantidad de enemigos granjeados, no han perdido su apetito por el negocio, y meditan cómo volver a la primera línea.
Así, la familia Ruíz-Mateos, cuyo patrimonio al completo está embargado por la Audiencia Nacional, trataría de gestar una tercera Rumasa mediante sociedades pantalla con las que eludirían el embargo judicial, según adelantaron en El Mundo los considerados como los mejores reporteros de investigación de España, Eduardo Inda y Esteban Urreiztieta.
Fideliza, Sumarsan e Inerzia serían las sociedades pantalla que ultiman la familia propietaria de la cadena hotelera Hotasa, y con las que eludirían las investigaciones por presunto fraude de la Audiencia Nacional. Cabe recordar que la Rumasa original fue expropiada por el Gobierno en 1983, y la segunda, vendida al liquidador Ángel de Cabo, a quien se le han bloqueado fondos por valor de 4,5 millones de euros en cuentas suizas.
Gerardo Díaz Ferrán, por su parte, intentó la puesta en marcha de una compañía de cruceros, según adelantó Lucas García en preferente.com en febrero citando a empresarios y profesionales a los que había contactado el expresidente de la CEOE y del Grupo Marsans para integrarlos como socios y directivos en el proyecto.
Díaz Ferrán no figuraría de forma oficial como cabeza visible del proyecto crucerístico, al menos en su fase inicial, y contaría con el apoyo de un hotelero valenciano con establecimientos también en El Caribe. Su plan contemplaba a medio plazo la incorporación de otras líneas de negocios del Sector como agencias minoristas y un touroperador.
El proyecto del exdueño de Marsans se encuentra detenido desde hace unos meses, según ha podido saber este digital, al mismo tiempo que del plan de Ruiz-Mateos para levantar una Rumasa III no se tienen nuevas informaciones, aunque en cualquier caso, queda claro que a estos dos polémicos empresarios no les falta espíritu emprendedor, pese a que parezca difícil imaginar quién se atreverá a volver a ser cliente suyo.
MÁS CLARO QUE NUNCA, MALA HIERBA NUNCA MUERE
Son los dos el retrato de como funciona la justicia en este pais, uno que si esta malito y no se presenta en el juzgado, y el otro echandole la culpa a zapatero de si esto o lo otro
¿Viejos Rockeros?...anda no insultes al rock, mide tus palabras...en todo caso son como cucarachas...y eso que las cucarachas con lo asquerosas que son no roban a nadie.