Saga: la quiebra de Thomas Cook le da una segunda oportunidad

Hace años que cada vez que salen las cifras de negocio de Saga, el turoperador británico especializado en la tercera edad, todo el mundo se echa a temblar. Pero esta vez, como la muerte de Thomas Cook ha dejado un hueco, Saga presenta cifras que, dentro de su situación, son muy buenas. Tanto que ha dicho que va a cumplir si horizonte anual de beneficios (recordemos que las cifras en Gran Bretaña van de 1 de abril a 1 de abril).

Saga se especializa en mayores de 50 años y en vender seguros de viajes. Hace un año lanzó una reconversión completa de su negocio. Ahora presenta unas cifras bastante admisibles, lo cual los expertos atribuyen más a la muerte de Thomas Cook que a la renovación de su producto. “Pese a esto, Saga sigue enfrentada a un mercado complicado, y tiene que continuar mejorando su gestión y la eficiencia de costes”, dijo Euan Sutherland, máximo responsable de la compañía.

Pese a ello, las acciones mejoraron su valor en bolsa, porque pocas veces en los últimos cinco años daban resultados positivos.

Los beneficios esperados son de 105 millones como mínimo, de 120 como máximo. 

Saga, no obstante, ahora se enfrenta, como todo el sector, al problema de China, que puede afectar a su negocio aunque de forma indirecta, dado que no está operando en ese país. Por otro lado, como en general sucede en el sector, Saga está ganando con los cruceros y con algunos negocios, pero pierde negocio en la tour operación.