“Si las protestas siguen en aumento, ahuyentarán a nuestros visitantes”

El máximo representante de Aviba, Pedro Fiol, avisa que la continuación de las protestas en Baleares puede poner en riesgo la economía de la región. En una entrevista concedida a Preferente, apunta que, aunque las movilizaciones no han tenido efecto en las reservas, proseguir con los ataques al sector puede terminar ahuyentando a los turistas. No obstante, la situación en términos de ventas avanza con normalidad, con un verano muy positivo, y unas grandes previsiones para el cierre del año 2024.

Pregunta. ¿Cuál es el balance de la temporada de verano? ¿Ha sido tan positiva como se esperaba o ha habido altibajos?

Respuesta. Para nuestro sector, sin duda, ha sido un muy buen año. Quizás debamos matizar cómo ha ido en las distintas islas. Si nos referimos a Ibiza, la menor, quizá hayan estado más a expensas de reservas de última hora, aunque finalmente la temporada haya sido muy parecida a la del año pasado. En cuanto a Menorca, con la capacidad de captar nuevos mercados, ha podido experimentar un ligero crecimiento en comparación al año anterior, aunque siguen padeciendo las consecuencias de temporadas muy cortas y una gran falta de conectividad en temporada baja. En Mallorca, sin duda han crecido tanto el número de reservas de paquetes como el número de servicios sueltos, por lo que el balance es muy positivo.

Cabe destacar que cada vez más agencias y turoperadores locales tienen mayor capacidad de penetrar en diversos sistemas de reservas online, lo que permite aumentar el número de servicios prestados si nos referimos a paquetería dinámica.

Lo que ha quedado patente es la capacidad de rápida respuesta que han tenido nuestras agencias frente a ligeros descensos de mercados tradicionales, sabiéndolos contrarrestar con otros mercados que han aflorado significativamente esta temporada. Además, conseguimos adaptar nuestra oferta a las necesidades actuales de algunos mercados donde la inflación sostenida que sufren (con ligero descenso de poder adquisitivo) ha provocado una contracción en el número de noches contratadas y actividades complementarias.

P. ¿Se ha conseguido contener el alza de precios por la inflación? ¿Qué medidas se han llevado a cabo?

R. El incremento de precios tanto de los servicios aéreos como del alojamiento han quedado patentes en esta y en la temporada anterior, por ello hemos sabido lanzar una muy buena venta anticipada, premiando claramente al turista previsor intentando disuadirle de una posible compra de última hora. Enseguida pudimos detectar que la demanda se adaptaba a estos incrementos de los servicios por lo que transmitió cierta tranquilidad al sector. También hemos conseguido colocar nuestro producto enfocado a una clase media con precios muy competitivos gracias al trabajo de una excelente precontratación de vuelos especiales y una gran contratación hotelera. Cabe destacar que en algunos mercados no ha quedado otro remedio que "paquetizar" por menos noches y con hoteles de menor categoría; afortunadamente estos son los menos.

También hemos intentado ofertar una contratación de servicios alimenticios donde el cliente tuviera prácticamente cubierto parte o la totalidad de su manutención en destino, a sabiendas de que era un año donde algunas economías europeas valoraban el tener todos los servicios precontratados en origen a fin de evitar posibles variaciones en el coste de sus vacaciones.

No podemos obviar que aún siguen teniendo cierta relevancia las ofertas de última hora, y más cuando asumimos riesgos en la contratación aérea o en cupos de los diferentes alojamientos turísticos. Afortunadamente, ya no dependemos tanto del last minute.

P. ¿Ha notado algún efecto negativo derivado de las protestas contra los turistas en Baleares?

R. En cuanto a volumen de reservas o cifras de negocio, está claro que las protestas que han tenido lugar este año no han calado lo suficiente como para que notemos un descenso en nuestras reservas, pero sí han puesto en vilo a agencias y TTOO ante un posible aumento de actitudes hostiles de los residentes hacia los turistas. Por ello, es muy importante que se lance una batería de medidas que armonice la relación entre algunos residentes que perciben el turismo como una amenaza ante los turistas que son ajenos a esta problemática.

Lo que es indiscutible es que ningún turista viaja a un lugar donde no perciba cierta hospitalidad por parte de los lugareños, con lo que, si estas protestas siguen en aumento, finalmente conseguirán el propósito por el cual fueron creadas, que es ahuyentar a nuestros visitantes poniendo en grave peligro nuestra economía local… Aunque la gran mayoría tiene claro que el problema es una cuestión de falta de inversión en infraestructuras esenciales, al igual que una extensísima falta de vivienda y un transporte público insuficiente, está claro que la información que trasciende a nivel internacional no podemos controlarla por lo que se traduce en que el mensaje de estas manifestaciones redunda en la completa negativa de recibir a cualquier tipo de turista.

P. En nuestra última entrevista, analizaba los efectos de la posible alianza Iberia-Air Europa. ¿Qué le parece la decisión de Bruselas de tumbar la operación?

R. Mentiría si dijera que no se respira cierta satisfacción y tranquilidad con esta decisión, puesto que Air Europa es indispensable actualmente, ya no solo por la conectividad en vuelos domésticos sino también para vuelos de largo radio. Una Air Europa controlada por su gran rival hubiera provocado sin duda un aumento de precios para el consumidor, además de una pérdida de opciones o alternativas en vuelos con escala en Madrid.

P. ¿Cómo valora la nueva moratoria del polémico Real Decreto 933/2021? ¿Es una normativa que pone en peligro el negocio de las agencias?

R. No puedo valorar positivamente una prórroga, ya que esto simplemente está dilatando la agonía, aun así, todo aquello que nos dé un margen de poder sentarnos y convencerles de que es de imposible cumplimiento para las agencias, nos da cierto balón de oxígeno y esperanza para que finalmente podamos hacerles ver de que es una mala decisión para nuestro sector.

Respecto a si pone en peligro el negocio, indiscutiblemente sí. Por un lado, las agencias especializadas en MICE y receptivas tendrán que volcar tanta información que probablemente genere muchos incidentes operativos para sus clientes. Por otro lado, las agencias pequeñas realizarán todos estos procesos de manera manual, haciéndoles bajar significativamente su productividad diaria, puesto que ya son muchos los procesos que debe realizar un agente de viajes para una correcta ejecución de los mismos para que aún tengan que estar transcribiendo una información que la mayoría de veces desconocen.

Lo más sorprendente de todo esto es que desconocemos qué tratamiento se dará a estos datos tan sensibles de nuestros clientes.

P. ¿Cómo están funcionando las ventas de cara al último trimestre del año?

R. Respecto al emisor, la progresión está siendo muy buena, destacando que los residentes en Baleares cada vez más confían sus vacaciones, y sobre todo cuando hablamos de larga distancia, en su agencia de viajes de confianza. Aunque hemos vuelto a detectar un incremento de clientes "curiosos", que se aprovechan del asesoramiento gratuito de las agencias para luego dar el salto y contratarlo ellos directamente. Ambos indicadores señalarían que estamos en el mismo escenario previo a la pandemia; lo más importante es que hay un creciente sentimiento en que todo aquello que viene contratado mediante agencia de viajes genera más tranquilidad y confianza en el consumidor.

En cuanto a receptivas, podemos destacar que septiembre ya puede considerarse como un mes de altísima demanda y algunas veces equiparable en precio al mes de agosto, aunque lo más destacable es que podremos seguir manteniendo un buen flujo de ventas hasta finales de octubre, que se está caracterizando por ser un mes que se consolida como excelente en cuanto a rentabilidad y número de visitantes.

P. ¿Y para el conjunto de 2024? ¿Se batirán los mejores registros en comparación con el año pasado?

R. Esta información fue contrastada recientemente por nuestra asociación cuando les hicimos esta misma pregunta a nuestros asociados. El 90% considera que este año será igual o mejor que el pasado; esto es una clara señal de que existe optimismo entre el sector. No obstante, siempre tenemos la sensación de que debemos seguir superándonos y adaptándonos a los nuevos tiempos. La digitalización sigue resistiéndose en las empresas más pequeñas y siempre existe un miedo a que los conflictos geopolíticos actuales y venideros acaben salpicando estos años de bonanza.