Nada ha cambiado realmente en Egipto o en Túnez, pero a medida que se van olvidando los atentados, los gobiernos van devolviendo las cosas a la normalidad, de forma que los turistas pueden volver a los hoteles, hoy semivacíos, de estos dos países. El ministerio belga de Asuntos Exteriores acaba de anunciar que levanta las restricciones de viaje a Túnez, tras el horrendo ataque que tuvo lugar en Sousse, delante de un hotel que entonces era de la cadena Riu.
Inmediatamente, Thomas Cook anunció que desde el 8 de abril volverá a volar a ese país, reiniciando sus operaciones turísticas. La TUI también anunció casi al mismo tiempo que recuperará la normalidad, aunque no fijó una fecha para sus vuelos.
Thomas Cook, en efecto, volará el 8 de abril al aeropuerto de Enfidha, en la región de Hammamet.
Pese a todo, el ministerio ha pedido a sus ciudadanos que tomen todas las medidas de seguridad que se consideren oportunas, intentando evitar las grandes concentraciones de público en los lugares públicos. Teniendo en cuenta que el último atentado tuvo lugar en una playa, en los jardines de un hotel e incluso en el hall, cuesta entender cómo ir de vacaciones y evitar estos lugares.
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