ABTA ofrece la solución al aluvión de reclamaciones

La asociación de agencias de viajes y touroperadores británicos (ABTA) se ha puesto a resolver el tremendo lío de las reclamaciones de los turistas por fallos en las estancias en sus hoteles de destino. Como saben, desde ABTA ya se ofrecen muchos servicios a los viajeros, que garantizan, por ejemplo, su retorno a casa en caso de que su operador quiebre.

Ahora, el objetivo de ABTA es crear un servicio de conciliación por el cual los usuarios que tengan quejas sobre los servicios recibidos en su viaje, hasta un importe de 10.000 libras –algo menos de 12 mil euros--, puedan acudir a una mediación, con costes mucho más bajos y sin acudir a los abogados y tribunales que terminan encareciendo notablemente estos servicios.

El servicio de mediación es prestado por una organización llamada Centro para la Solución Efectiva de los Conflictos (CEDR, por sus iniciales en inglés) y resolverá los problemas en un máximo de ocho semanas, evitando que estos procesos se conviertan en negocios lucrativos para diversas organizaciones.

Esta iniciativa de ABTA pretende abordar el aumento inesperado de las reclamaciones de los clientes que, tras un cambio legal en 2013, han terminado por crear un negocio lucrativo para empresas legales intermediarias.

Para acceder a esta mediación hay que haber reservado el viaje mediante una agencia asociada a ABTA –la práctica totalidad están en esta situación–.  Esta solución, comparable a las mediaciones en otras áreas, es voluntaria, pero probablemente se convierta en la solución para el complejo y costoso problema generado en Gran Bretaña con las reclamaciones, que afectan de lleno a los hoteles españoles.