Observen lo que es Airbnb: ni un ladrillo en propiedad y, sin embargo, cinco millones de clientes durante 2023 en todo el mundo. Un concepto nuevo de hotelera que ha revolucionado el mercado (Airbnb planea llevar su negocio más allá del alojamiento).
Sólo en el cuarto trimestre del 2023 vendió 99 millones de pernoctaciones, con un incremento del 12 por ciento sobre el año anterior, que ya no era Covid. Los ingresos alcanzaron los 2.200 millones de dólares (recuerden que hablamos de tres meses), con un aumento del 17 por ciento. Y después están los resultados que hay que analizar en detalle: perdió 349 millones de dólares, pero esta cifra es el resultado de desviar casi mil millones del Ebitda para varios usos, fundamentalmente consolidar la empresa. El resultado sin este concepto hubiera sido de 489 millones, por encima del año anterior.
Airbnb en realidad se comporta como un negocio en crecimiento, no maduro. Por eso añadió incontables detalles a su procedimiento, consiguiendo reducir las cancelaciones en un 36 por ciento respecto a lo que era normal antes. Ha introducido un sistema de descuentos para atrapar a los clientes. Y se ha centrado en desarrollarse en tres mercados que no cubría bien, como es Suiza, Bélgica y Holanda, tras el éxito de políticas similares en Alemania, Brasil y Corea del Sur.
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