Airbnb se enfrenta a Cataluña por su límite a las viviendas turísticas

El nuevo decreto aprobado por Cataluña contra el alquiler vacacional no ha sentado nada bien a Airbnb. Su directora general de marketing services, Mónica Casañas, ha remitido una carta al presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, en la que reclama llevar a cabo “una evaluación de impacto de las normas turísticas existentes”, así como realizar “una consulta pública que incluya a todos los agentes de esta actividad”. (Barcelona sube impuestos a 'Airbnb' y cruceros más que a hoteles)

Como publicó Preferente, el ejecutivo catalán otorgará a los municipios las herramientas para limitar el número de licencias que se reparten y obligará a renovar los permisos urbanísticos cada cinco años. Además, las zonas que quieran acoger apartamentos turísticos deberán justificar que cuentan con suelo suficiente destinado a vivienda residencial, limitándose a 10 por cada 100 habitantes. (Cataluña pone coto a las viviendas turísticas a golpe de decreto)

En este sentido, Casañas ve necesario que la normativa se alinee con las impuestas desde Bruselas. “La oportunidad de acceder a información y datos sobre el impacto de los alquileres a corto plazo en Cataluña nunca ha sido mayor después de que la UE haya acordado un nuevo marco regulatorio. Las autoridades de Cataluña podrán mejorar los sistemas de registro, obteniendo información detallada sobre quién aloja, dónde y con qué frecuencia”.

Así, considera que decreto que plantea la Comunidad “restringe la actividad sin evidencias suficientes sobre dónde se encuentran los desafíos. Un enfoque que probablemente tenga consecuencias no deseadas, como no permitir que los habitantes y comercios locales de esos municipios se beneficien del turismo en lugares con una gran oferta de viviendas, pero muy poca población”.

“En Cataluña, casi 4 de cada 10 pueblos carecen de opciones de alojamiento, y en muchos otros municipios que dependen del turismo estacional, las viviendas familiares ya existentes desempeñan un papel crucial en la economía local. Gracias a ello, tanto los negocios locales como los propios pueblos obtienen beneficios directos sin tener que construir más infraestructura turística”, prosigue.

Pese a este enfrentamiento, la directiva asegura que “Airbnb sigue comprometida en trabajar de manera conjunta con la Generalitat allá donde haya tensiones en el mercado de la vivienda y en luchar contra el turismo de masas”. Sin embargo, ve “necesario asegurar que las nuevas normas son efectivas para todos y consiguen sus objetivos sin dañar a los ciudadanos de a pie”.