El presidente de Ashotel, Jorge Marichal, confía en la unidad del sector turístico y en que la Cehat pueda frenar la supuesta estafa de los conocidos popularmente como ‘abogados piratas’ que se estarían lucrando pidiendo a turistas que reclamen contra algunos establecimientos turísticos por falsas intoxicaciones alimentarias para cobrar “apetitosas indemnizaciones”.
Los hoteleros de Tenerife denuncian que, en su caso, a cambio de las quejas contra 12 establecimientos asociados, a los que se han llegado a interponer hasta 150 reclamaciones por valor de entre 3.500 y 5.500 euros cada una, les ofrecen a los turistas importantes cantidades de dinero “para que las vacaciones les salgan gratis”.
Ante esta situación, desde Ashotel inciden en que esta problemática afecta, además, a empresarios de Baleares, Benidorm o Costa del Sol por lo que esperan que “papá Cehat nos resuelva el problema”.
Marichal destaca que “tras las averiguaciones iniciales en las que nos preguntábamos del por qué de estas prácticas fraudulentas se mantuvo un primer encuentro en Londres, en el que el secretario general de la Confederación, Ramón Estalella, expuso esta situación a representantes de los principales turoperadores, de la Embajada Española en Londres y de las Oficinas Españolas de Turismo (OET). Después, en una segunda reunión aunque ya en Madrid, el presidente de la Cehat, Juan Molas, ahondó en esta circunstancia con la secretaria de Estado de Turismo, Isabel Borrego, y a la que se sumaron también las OET y otros agentes implicados”.
Así pues, el presidente de Ashotel concluye que a la espera de encontrar la solución “debemos apoyar sin fisuras la acción de nuestra patronal nacional, pero podemos ampliar nuestro margen de acción y contribuir de forma clara y decidida a erradicar, o minimizar al menos, los efectos dañinos de esta práctica pirata todos juntos”.
La CHET,la OET y la embajada, e incluso las asociaciones de agencias británicas, deberían contar con un despacho de abogados en el reino unido y recurrir todos y cada uno de estos intentos de fraude , y demostrar que lo son
ademas solicitar a los turistas que se prestan a esta ilegalidades una indemnización por calumnias , daños y perjuicios del mismo orden que ellos solicitan al hotel , a la segunda sentencia ,
y también solicitar al ministerio de justicia y/o colegio de abogados del reino unido que abra una investigación a estos abogados. Acompañada de una adecuada campaña de "información" en la prensa se acaba el problema
la inacción, lo único que alimenta es mas reclamaciones y mas perdidas.
es muy probable que este problema lo están sufriendo hoteleros griegos, italianos y de otras latitudes, coordinarse con ellos tampoco seria una mala opción.
Los turistas quizás no padezcan intoxicaciones alimenticias, exceptuado aquellos con salmonelosis, basándome en casos verídicos y no solo en hoteles, restaurantes, pero pueden preguntar al personal de los mismos y sus esplendidos menús a los que son sometidos, los que les hace disfrutar con veranos de autenticas diarreas.