El nuevo calendario electoral establecido por el Gobierno para el próximo 23 de julio también está ralentizando el volumen de reservas en los hoteles de Barceló. El consejero delegado de la compañía, Raúl González, ha informado, en un encuentro con la prensa, que viene ocurriendo en las últimas semanas por la incertidumbre que genera la marcha a las urnas. (Alarma hotelera: las reservas llevan una quincena frenadas)
“Antes de la convocatoria, las reservas estaban un 8% por encima del mismo período de 2019, y ahora se encuentran al 4%”, ha apuntado. Por suerte, según cuenta Cinco Días, la caída es prácticamente mínima, y las ventas continúan superando las prepandemia.
En este sentido, González considera que se trata de una caída puntual y que la temporada de verano no se verá afectada. “De momento, lo que veo en los datos es que no va a haber frenazo. Hay recesión en Alemania y no será el país que más crezca este verano, pero sigue habiendo una demanda muy sana”. “Sin caer en el optimismo desbordante e insensato habrá un muy buen verano”, prosigue.
Todo ello pese al alza generalizado de los precios en el sector. En el caso concreto de Barceló, se han incrementado “entre un 6% y un 7% este año, y se sitúan un 20% por encima de los niveles de 2019″. (Polémica por las elevadas tarifas hoteleras tras frenarse las reservas)
Mientras tanto, la hotelera continuará con su ritmo de recuperación centrándose en la compra de activos en propiedad. “Tenemos más propiedad que nunca. Pese a ser menos rentable, somos una empresa familiar que trata de buscar un equilibrio entre la parte patrimonial y la gestión para terceros y que tiene vocación de permanencia”, concluye.
Esperemos que las ventas se animen y hagamos buenos numeros, todos, en Octubre.