La Península y Baleares están ahora en temporada turística baja pero Canarias, por el contrario, está en su momento álgido. Pese a los malos augurios que anunciaba la quiebra de Thomas Cook, la planta hotelera de todas las islas Canarias está garantizada al máximo para el momento de más demanda, del 25 de diciembre al 6 de enero. En el caso de Gran Canaria, la isla se encuentra prácticamente al cien por ciento de ocupación, según publica Canarias 7, el periódico local (Los hoteles canarios vendieron un 1,5% menos por Thomas Cook).
En Maspalomas, Mogán o Meloneras durante las fiestas tendrán los hoteles totalmente llenos, con más del 95 por ciento de ocupación, mientras que otras zonas e islas están siempre por encima del 90 por ciento. El presidente de los empresarios hoteleros, José María Mañaricua, echa un poco de agua fría sobre estas cifras, al indicar que esto es lo que ocurre todos los años entre el 25 de diciembre y el 6 de enero, cuando además se aplican las tarifas más altas.
Sin embargo, antes de Navidades y después de Reyes, las cosas no serán tan positivas. Pero, con todo, el presidente de los hoteleros dice que los precios están más altos que el año pasado, explicando que, por ejemplo, hay una recuperación del mercado nórdico que, en buena medida, reemplaza a los turistas que se perdieron por el cierre de Thomas Cook.
El periódico, en todo caso, certifica que no ha habido una crisis por la caída de Thomas Cook, pese a que Canarias era, con diferencia, la región más afectada. Ni siquiera en octubre, inmediatamente después de la quiebra se produjo un desastre, aunque hubo una merma de cinco puntos en la ocupación, pero de apenas el 1.5 por ciento en ingresos económicos.
Vaya a tope con tanto drama que montaron algunos jetas cuando se produjo el cierre de Thomas cook,para cobrar dinero público y así pagar la mala gestión realizada.Es una vergüenza,el dinero público no está para regalarlo a unos trileros.Hay operadores suficientes para atender el mercado siempre y cuando esas operaciones sean rentables