Carolina Quetglas, flamante nueva presidenta de la Agrupación de Cadenas Hoteleras de Balears (ACH) tras concluir el mandato de Gabriel Llobera, y también directora general de BQ Hoteles, ha revelado en una entrevista con Diario de Mallorca las claves de esta temporada alta para el sector, que se pueden resumir en 5 asuntos.
--Ocupación. En junio se ha movido entre el 85% y el 88% como media en Baleares. Y en julio se estima que ha subido hasta un 92% o un 95%. Aunque queda mucho por vender todavía, se espera que durante agosto se mantenga ese 92% a 95%.
--Rentabilidad. La subida de los costes no se ha podido repercutir en los precios hasta hoy, ya que las tarifas con los touroperadores se negocian un año antes, y aunque son algo superiores a los de 2019, la rentabilidad va a bajar notablemente al encarecerse más los gastos.
--Tarifas en 2023. La pretensión hotelera es subir un 8% o incluso un 10%, pero va a ser difícil ante la crisis brutal a nivel europeo. No obstante, sus costes han subido un 25% o un 40%.
--Personal. Al buscar camareras de piso para todo el año en alguno de nuestros hoteles y hemos propuesto a algunas de nuestras fijas discontinuas si querían pasar a fijas, muchas nos han dicho que no, porque prefieren trabajar ocho meses aquí y pasar el invierno en la península. Sobre el problema de la vivienda en las islas también lo tienen médicos y enfermeras, por ejemplo, por lo que ayudaría que se persiguiera más ese alquiler vacacional cuando es ilegal, que sigue habiendo mucho.
--Limitar turistas o plazas. Carmen Riu señaló la necesidad de no crecer y de poner límites al alquiler vacacional ilegal, no limitar la llegada de turistas.
Lo unico acertado lo del abusivismo.