El sector turístico canario alza la voz ante la pasividad de las administraciones a la hora de renovar los espacios públicos en los destinos. En una rueda de prensa recogida por Efe, las principales patronales insulares (Ashotel, FEHT, Asofuer y FTL) han reclamado que se retomen los planes de mejora y modernización turística (PMM), con mayores atractivos e incentivos.
Ponen el foco en tres puntos importantes. Primeramente, en la desaparición de plazas alojativas extrahoteleras en la región, alertando de que, en siete años se han perdido 658 establecimientos y más de 68.000 camas, siendo Gran Canaria la más afectada. Para las asociaciones, esto implica “la caída en la capacidad económica, la recaudación de impuestos y los puestos de trabajo”.
Los dos siguientes puntos clave son el trámite de licencias e informes de impacto ambiental. “No puede ser es que los empresarios tengamos que estar detrás de las administraciones públicas para que no se les pase el plazo de una declaración de impacto ambiental. Tampoco se puede tardar dos años en que un ayuntamiento dé una licencia”, critica el presidente de Ashotel, Jorge Marichal.
Por su parte, el presidente de la FEHT, José María Mañaricúa, ha lamentado que “hemos visto cómo estos PMM se han dejado de realizar, sin que haya tampoco renovación de espacios públicos”. En su opinión, “es la herramienta que se debe rescatar y acabar con su lentitud”.
Durante su intervención, Marichal también ha incidido en la necesidad de tomar medidas contra la residencialización de las principales zonas turísticas o el alquiler vacacional. A este respecto, avisa de está derivando en “procesos de turismofobia”, y una “convivencia imposible”.
Claro ejemplo las zonas de Tenerife Sur, Cristianos que da miedo esa entrada desde la autovía y muchos de sus paseos desfasados y abandonados, Playa De Las Américas con Verónicas, el Hotel Sol Tenerife decadencia absoluta de los 70 sin la más mínima intención de ser renovados ni mejorados con permanentes pandillas de vendedores de todo y locales con música hasta las 4 de la mañana como mínimo, que pena y desfase.
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La residencialización es inevitable. Todo el mundo quiere vivir en un lugar bonito y tiene derecho a ello. Quieren expropiar el espacio con una avaricia que va a pasar factura. Si piensan que ahora hay turismofobia, que echen a las gentes de sus casas para meter turistas. Van a la guerra