Costa del Sol: los ingleses llegan en masa tras las vacaciones de Boris Johnson

Unas vacaciones de una semana del primer ministro de Gran Bretaña en Benahavis y dos semanas de la filmación de una serie de Netflix han arrojado como consecuencia una pequeña inundación de británicos en la Costa del Sol. Los empresarios de la zona están encantados del fantástico efecto publicitario de los dos eventos que ayudado a salvar el final de la temporada (contando, por supuesto, con las vacaciones escolares que tienen lugar estos días).

La prensa malagueña se hace eco del fuerte incremento en el número de visitantes británicos. Entre los consultados hay empleados del aeropuerto que indican que a día de hoy es bastante superior el número de personas que llegan a Málaga procedentes de aeropuertos de Gran Bretaña que el número de los que está retornando.

Laura Arce, la responsable de la promoción de turismo de Marbella, indicó a la prensa local que es indudable el efecto de Johnson y también de la serie de Netflix. Añadió que es tradicional que ocurra algo así y ella misma recuerda otras visitas en el pasado que han generado de forma inmediata un efecto positivo en las visitas y las reservas.

Entre el empresariado local, el incremento de británicos ha sido acogido con alivio. Al igual que Ibiza, Menorca o Benidorm, la Costa del Sol tiene una potente dependencia del mercado británico que, hasta el momento no estaba respondiendo bien a la mejora de las cifras de coronavirus en España. Sin embargo, hay que recordar que, aparte de la acción promocional que pudo haber supuesto la visita del primer ministro, hasta este lunes todo viajero que regresaba desde España, incluso estando vacunado, debía someterse a una prueba PCR antes de partir de España y otra a los dos días de haber llegado, lo cual normalmente tiene un coste superior al precio del transporte aéreo a España.