Un informe encargado por el Consell de Mallorca a expertos y ecologistas para definir la isla del 2030 descubre que Baleares suma hoy 625.000 plazas turísticas tras haberse disparado un 43 por ciento en una década a causa del alquiler vacacional auspiciado por Airbnb.
Este documento se encargó hace más de un año y se remitió al Consell el pasado febrero, pero según Última Hora los autores solo han recibido un acuse de recibo, y estas claves “se han guardado en un cajón”.
La barra libre para la oferta residencial se abrirse a la muy corta estancia fue defendida por los mismos sectores políticos y ecologistas que ahora mismo son los más críticos con la saturación y masificación que a su juicio se sufre en las islas por culpa del turismo.
Hace pocas fechas la organización GOB por boca de su presidente reconoció su error de haber apoyado este modelo de alojamiento solo porque lo veía perjudicial para el hotelero, y que ha traido como consecuencia que el acceso a la vivienda se haya convertido en la mayor preocupación de los isleños al reducirse la oferta disponible para residentes a la par que ha aumentado la demanda al incluir a los extranjeros.
Tras la asunción pública de responsabilidades por parte de movimientos ecologistas, las autoridades, en contraste, reiteran que su objetivo es limitar el turismo después de haber propiciado un modelo contrario al ordenado con hoteles, turoperadores y autocares, que evitaba colapsos en carreteras, aparcamientos y centros urbanos, además de que no creaba problemas de convivencia vecinal ni las dificultades presentes para poder pagar una casa.
Habrá que quitar hoteles que son los que más personas reciben en un solo día.
no es cierto. antes todo podia ser legalmente turistico. qhora se ha limitado y se cuenta.
antes de airbnbs y otros ya habia turismo en los chalets y apartamentos.