El Gobierno de Estados Unidos que preside Donald Trump, que según confirmó Meliá había prohibido la entrada al país norteamericano de su CEO Gabriel Escarrer por las relaciones con Cuba, también ha vetado la entrada dentro de sus fronteras a más grandes hoteleros españoles por el mismo asunto, según ha podido confirmar preferente.com tras contrastarlo con fuentes diplomáticas (Meliá reaccionará a la reclamación de EEUU contra su CEO por Cuba).
Estados Unidos vetó hace unas semanas la entrada al país a Gabriel Escarrer y a sus familiares, así como a otros directivos de la mayor hotelera vacacional del mundo como es Meliá, y la administración que encabeza Donald Trump también ha anunciado a varios grandes empresarios españoles con negocios hoteleros en Cuba que no pueden aterrizar en la mayor potencia mundial, aún cuando alguno de ellos posee establecimientos en EEUU.
Meliá informaba hace unos días tras revelarlo Vozpopuli que Gabriel Escarrer tenía prohibido el acceso a Estados Unidos en aplicación de la ley Helms-Burton, tras recibir la carta del Departamento de Estado de EEUU el pasado 11 de octubre de 2019. En este comunicado, Meliá sostuvo en condicional que otras cartas similares “habrían sido dirigidas" “a más de medio centenar de empresas con intereses en Cuba”, un extremo que finalmente preferente.com ha podido corroborar.
Escarrer, según el comunicado de Meliá, fue vetado a entrar en EEUU "en aplicación del Titulo IV del “Liberty Act” (también conocida como Ley Helms Burton) y en caso de no aceptar una serie de condiciones relacionadas con la actividad en la República de Cuba de empresas filiales, en un plazo de 45 días se le prohibiría el acceso a los Estados Unidos de América. Creemos que cartas similares habrían sido dirigidas a más de medio centenar de empresas con intereses en Cuba".
La Administración estadounidense vinculaba esta notificación a la actividad que determinadas empresas filiales mantienen con entidades públicas cubanas para la gestión de dos hoteles situados en la región de Holguín, que estarían ubicados, a su entender, en una parcela de una propiedad expropiada a la familia Sanchez Hill a finales de los años 50 del siglo pasado. Cabe recordar que la demanda iniciada en España por los supuestos representantes de la familia mencionada fue desestimada íntegramente por nuestros tribunales en primera instancia (Helms-Burton: Meliá califica de “burda caricatura” la demanda de los Sánchez Hill).
La prohibición del gobierno de EEUU al acceso a su país a varios de los grandes hoteleros españoles, que son los número uno a nivel mundial en la industria de los resorts, ha supuesto un varapalo para los afectados, no solo por contar con hoteles en la primera potencia mundial, sino porque también sus principales clientes se hallan en suelo estadounidense y en algunos casos por vínculos afectivos derivados de estancias universitarias o primeras experiencias laborales.
Pese a esta inédita presión de Estados Unidos contra los grandes hoteleros españoles, los líderes de las principales vacacionales con presencia en Cuba están manteniéndose firmes en su apoyo al turismo de la mayor de las Antillas aún pese al elevado peaje que les está suponiendo.
Los ladrones hoteleros españoles que se aprovecharon al quedarse con hoteles negociando con los cerdos comunistas cubanos merecen quedarse sin nada si no indemnizan o negocian
Pues que luego venga Trump por aquí también, para intermediar y que devuelvan lo que expropiaron los fascitas
Y que luego digan que no hay bloqueo.Por favor
Es normal que USA defienda la propiedad privada y a los legítimos propietarios. A los hoteleros les va a salir caro su pacto con los comunistas para obtener cuatro chavos. Que paguen.
Para semana santa,se preveen complicaciones,en el catering de los vuelos,con salida desde BCN.