Barcelona. 23/04/09.- El consistorio barcelonés, además de preocuparse por la prosperidad de la ciudad condal, cuenta con varios negocios turísticos de solvencia cuestionable. Pues, además de ser poseedor de un parque de atracciones y un restaurante en el edificio Fórum, también cuenta con una participación en el hotel Miramar.
Es esta última una de las más llamativas por su carácter ruinoso. La participación del 12 por ciento de las acciones del Miramar suponen un coste anual de 1,3 millones de euros, a los que hay que sumar los 2,2 millones que ya se invirtieron para adecuar los jardines del entorno, un espacio de uso prácticamente exclusivo del hotel. Ahora, el tercer teniente de alcalde de Hacienda y Promoción Económica, Jordi William Carnes, ha anunciado la intención del Consistorio de abandonar la participación de hotel cuando éste se declare solvente.
El Ayuntamiento participa en el Miramar, a través de la empresa municipal Barcelona de Serveis Municipals (B:SM), como administración pública avaladora, al igual que ha sucedido con las administraciones públicas en otras ocasiones, como en la compañía Spanair. El resto de la participación del hotel es del accionista privado Apollo.
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