La orden judicial que suspende la normativa urbanística de Formentor impide la ampliación del complejo, pero no la reforma de las instalaciones, por lo que no podrán construirse las 100 nuevas plazas turísticas previstas, pasando de 250 a 350, según ha recordado Tomeu Cifre, alcalde de Pollença, el municipio mallorquín en el que se ubica el hotel.
El hotel, según Cinco Días, habría sido adquirido por el grupo Four Seasons, mientras que fuentes del grupo Barceló, sus actuales propietarios, insisten en que la operación no está cerrada.
En cualquier caso, como afirma Última Hora, desde Barceló señalan que hay mucho interés en el mercado “por hacerse con este activo y estamos recibiendo ofertas. Aunque no hay un especial interés en vender, lógicamente oiremos cualquier planteamiento que pueda hacérsenos y decidiremos al respecto. Pero en estos momentos el hotel sigue en Barceló Hotel Group, aunque permanezca cerrado hasta abril.
Cifre, por su parte reconoce que la situación del establecimiento es “compleja”, ya que “ahora se permite la reforma, pero no la ampliación que marca la ficha debido a la falta de un planeamiento y a la falta de dotación de servicios”.
Normal que Barceló se quiera deshacer de este activo. A pesar de encontrarse en un entorno paradisíaco el edificio es un bodrio anticuado y con olores a humedad con muchas limitaciones a la hora de su reforma. El que llegue volverá a darse de bruces en un intento por aumentar / mejorar el producto.
Conozco la casa soy empleado, en mi opinión si buscas un servicio de 5 estrellas, este hotel emblemático, tiene que posicionarse, como un hotel de lujo, y esto no se consigue con más camas, sino todo lo contrario, menos habitaciones y reforma integral del edificio, y de toda la oferta de servicios, que entiendo tiene que dar.