Mientras el sector turístico sigue alertando de los posibles efectos negativos de la inflación durante la temporada de otoño-invierno, en el Gobierno la postura es muy distinta. El secretario de Estado, Fernando Valdés, ha descartado que “la incertidumbre y la crisis inflacionista estén corrigiendo la tendencia de recuperación o la intensidad de la demanda a corto plazo”. (“Este Gobierno ha conseguido que se recupere el sector turístico”)
En una comparecencia en el Congreso, ha vaticinado que la tendencia de viajeros internacionales se mantendrá en una horquilla similar a la de la temporada de verano. Entre los meses de junio, julio y agosto, España ha conseguido recuperar cerca del 90% de los visitantes que aterrizaron en nuestro país antes de la pandemia.
Estas previsiones distan de las realizadas recientemente por grandes lobbies turísticos. El presidente de la Mesa del Turismo, Juan Molas, confirmaba a este periódico que el alza de los precios ya está afectando a la demanda y ha dejado ciertos cambios de hábitos durante el verano. “Se ha notado claramente en el recorte de las pernoctaciones”, expuso. (Las empresas turísticas temen no poder devolver los créditos)
Además, el hecho de que vengan viajeros extranjeros no siempre quiere decir que las empresas estén ganando dinero. El mayor problema que detecta el sector es que la inflación está mermando sus márgenes y, en consecuencia, reduciendo su rentabilidad. (Preocupa la pérdida de rentabilidad en las agencias)
Los márgenes “se han visto recortados”, declaraba Molas, debido a “un incremento de costes de en torno a un 30% en todas las partidas”. No obstante, en lugar de buscar una mayor rentabilidad, las empresas han apostado “por una contención en aras de favorecer la recuperación de la demanda, que era el principal objetivo”.
De mantenerse esta tendencia en el tiempo, el líder del lobby empresarial vaticinaba que las empresas podrán encontrarse grandes dificultades a la hora de afrontar los compromisos de deuda adquiridos durante la pandemia. Cabe recordar que la mayoría de estas recurrieron a créditos ICO para proteger su tesorería, mientras que otras fueron rescatadas por la SEPI o el fondo Cofides.
Los hoteles mas caros que nunca y dicen que estan perdiendo. Siempre llorando.