El lado opaco de Antonio Catalán: delator y chivato

Las denuncias y la demagogia de Antonio Catalán a propósito de la polémica sobre la externalización de las camareras de piso ha servido para retratar al presidente de AC Hoteles by Marriott: sus acusaciones contra NH y Meliá se volvieron contra él al desvelar El Confidencial que también en AC se usan los mismos métodos que tanto criticó.

Los ataques de Catalán, uno de los tres empresarios turísticos con más incontinencia verbal de nuestro país, no vienen de ahora, sino que datan de hace mucho tiempo, pues cuatro lustros atrás empezó a chivarse ante los medios de la situación de sus competidores, tal cual puede atestiguar nuestro grupo editorial cuando solo contábamos con la revista Preferente.

Además, el presidente de AC by Marriott, quien en una boda aspira a ser novio, cura, testigo e invitado, es un empresario que en lo personal tiene un lado oscuro que lo incapacita para dar lecciones ética, de buen hacer, ya que en época no muy lejana cometió excesos con cargos públicos del mundo del turismo como los llevado a cabo con un ex secretario de Estado.

En un caso insólito en la historia del turismo, ya que nunca se había visto nada igual, Catalán arremetió como es sabido contra sus colegas de NH y Meliá, sus más directos competidores, a los que citó literalmente por la externalización de los servicios de las camareras de piso, en un ataque sin precedentes entre cadenas que compiten, o competían, sin caer en acusaciones.

Unas denuncias que tuvieron un efecto boomerang para Antonio Catalán cuando al día siguiente de la arremetida  se demostró en el mismo medio que AC by Marriott también tiene contratado un servicio externo de camareras de piso, aunque en menor grado que el de sus colegas, por lo que su foto de delator y demagogo apareció en toda su magnitud.

Catalán, quien en su día llegó a discrepar de forma sorprendente de sus colegas por las inversiones que estos llevaban a cabo en el Caribe—él estuvo hace año y medio analizando in situ las posibilidades de implantarse en esta zona— ya se había retratado hace 22 años cuando llamó la revista Preferente para contar la situación financiera por la que atravesaba la cadena de Escarrer.

Puesto en contacto con el que fue director de nuestra  publicación desde el primer número y hasta su jubilación, Emilio Martínez, el entonces presidente de NH contó pelos y señales sobre las deudas que Sol Meliá tenía contraídas con Hacienda y  la Seguridad Social, previa a la salida a Bolsa de la hotelera mallorquina, en un actitud que refleja la forma de ser del empresario navarro.

De la estancia del ex secretario de Estado de turismo durante el Gobierno de Zapatero en la  casa que Antonio Catalán tiene en  las afueras de Madrid, en un barrio residencial, existe una gran opacidad dado que nunca se ha sabido si hubo o no pago por su uso, poniéndose en evidencia la falta de ejemplaridad tanto de la autoridad como del empresario.