El Puerto de la Cruz, que fue la pionera en Canarias de la industria vacacional hace unos cuarenta años en los que acaparaba una gran parte de las 7.000 camas turísticas que por aquel entonces había en Tenerife, ha visto como en los últimos cinco años su oferta alojativa se ha reducido en 3.041 camas, hasta completar un total de 21.391, según recoge este domingo el Diario de Avisos.
En los últimos cinco años en la ciudad turística cerraron diez establecimientos, cuatro de ellos hoteleros y seis extrahoteleros, es decir, apartamentos, pero para el consejero insular de Turismo, Carlos Alonso, estas camas no se perdieron definitivamente, ya que 1.409 se han dado de baja de manera temporal para someterse un proceso de rehabilitación y el resto se puede recuperar ya que así lo permite la nueva ley que, incluso, posibilita que se ganen camas, según Carlos Alonso.
En 2008, justo con el inicio de la actual crisis económica, cerraron cinco apartamentos, Marina, Tosca, Parque Tajinaste, Belair y Meliá La Paz, mientras en los años 2009 y 2011 no se registró ninguna baja; en 2010 solo la del hotel La Chiripa; en 2012 los apartamentos Valle Luz y Girasol y el hotel Régulo, y este año 2013 los apartamentos Séfora Park.
Carlos Alonso aclara que “no nos podemos quedar en el pasado, hay que recuperar turistas pero de otra manera, ya que nada va a ser lo que fue”. Entre otras cosas, porque la oferta, el perfil del turista y la competencia han cambiado mucho. “Hay que ser más competitivo, pero no anclarse en lo que ya no somos”. En la actualidad, la Isla supera las 160.000 camas y la mayoría está ubicada en el Sur.
Faltan establecimientos como Hotel Gema Puerto, Hotel Nopal, Hotel Atalaya, Apartamentos Teneguía, Apartamentos Seguro de Sol, Hotel Internacional, Hotel Martiánez que en los últimos años también han cerrado.
...pero no te preocupes Peramato, a los que mandan les queda el kiosko de Pipo y Cayaya abiertos para tener contento al pueblo , a los pescadores, y a los parados... Pero tienen la embarcacion y el mascarita pa' entretenerse... No les falta de nada.