Las viviendas turísticas siguen haciendo mella en Baleares, provocando que los precios del alquiler alcancen máximos históricos. Los últimos datos de Fotocasa revelan que se han triplicado en apenas una década, pasando de 562 euros en 2014 a 1.451 euros en la actualidad (Canarias y Baleares: el desmadre del alquiler vacacional, en cifras).
Según recoge Última Hora, la directora de Estudios y portavoz de Fotocasa, María Matos, alerta de que se trata del “mayor encarecimiento del arrendamiento de los últimos años”. “Esta tendencia supone una dificultad muy importante en el acceso a la vivienda”, añade.
Esta etapa de aumento desorbitado del precio de la vivienda ha coincidido con el mandato de Francina Armengol, que dio alas al alquiler vacacional de una manera brutal. Para que se hagan una idea, durante su gobierno, el número de plazas de alquiler creció de menos de 300.000 a casi 400.000, mientras que los hoteles sumaron solo 16.224 nuevas (El ‘modelo Armengol’: la vivienda sube un 200% pero los salarios un 23%).
Según estimaciones del actual Ejecutivo autonómico, en Baleares hay 235.000 inmuebles destinados al alquiler vacacional que no disponen de licencia. A esta cifra hay que sumarle las 26.443 viviendas vacacionales dadas de alta, lo que se traduce en una oferta total de 261.443 alojamientos dedicados a este fin, de los cuales el 90% operan de forma ilegal
En este sentido, el actual consejero de turismo, Jaume Bauzá, apunta, en una entrevista para mallorcadiario, que “la situación actual es consecuencia de ocho años de inacción en esta materia. Vemos que la sociedad manifiesta un cierto cansancio en momentos determinados, en situaciones puntuales de saturación, de congestión. Notamos que hay un cierto malestar”.
Y es que, en este periodo, “ha habido un incremento de 115.000 plazas turísticas y no se combatió el alquiler turístico ilegal. Esta es la situación”. Es por ello que aboga por “abrir un debate entre todos los agentes implicados para escuchar primeramente sus demandas, siempre basadas en datos, y que después la Administración pueda actuar”.
Preguntado sobre el miedo a las protestas en Baleares, promete “atacar la oferta turística ilegal, sea taxi, vivienda, comercio, etc”. No obstante, ya avisa de que “los extremistas, los turismofóbicos y los antisistema no van a tener cabida en este marco, donde la razón y el ‘seny’ van a imperar”.
Que curioso que todo sea culpa del anterior gobierno cuando fueron ellos que sacaron una ley contra el alquiler vacacional. El año pasado el PP defendía el alquiler vacacional: https://www.cronicabalear.es/2023/el-pp-defiende-el-alquiler-vacacional-y-recuperara-la-bolsa-de-plazas-turisticas-en-mallorca/
“El candidato del PP al Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, reivindica el alquilar vacacional ya que “se trata de una oferta turística que permite distribuir la riqueza entre mucha más gente en la isla y genera un beneficio enorme para autónomos y comerciantes”.”