Escarrer: “En turismo no hay un PERTE, y eso es un error”

Gabriel Escarrer, consejero delegado de Meliá Hotels International, lamenta el ninguneo del Gobierno central al que es el gran motor de la economía española con más del 13% del PIB (España tendrá en 2024 una dependencia histórica del turismo).

En un coloquio organizado por el Círculo Ecuestre, en Barcelona, el empresario ha lamentado que las administraciones no inviertan tanto en turismo como sería necesario. “En turismo no hay un PERTE, y eso es un error siendo el sector más afectado por la pandemia”, subraya.

En este sentido, critica que “el turismo se ha dejado en manos de las comunidades autónomas y los municipios, habiendo territorios con conocimientos muy limitados y una distribución económica poco estratégica”. “La colaboración público-privada y un plan de reposicionamiento es lo que España necesita”, remarca.

Escarrer ha aprovechado su intervención para abordar la problemática del alquiler vacacional. Aclara al respecto que su posición no es oponerse a este tipo de turismo, “sino al descontrol”. Es por ello que llama a “replantearnos el modelo turístico que queremos en Barcelona -haciendo alusión al sobrecrecimiento del alquiler turístico-, pero no de manera indefinida, puesto que sería ir en contra de la competencia del sector” (Escarrer: “Hay que poner coto al desmadre de la vivienda vacacional”).

Ahondando en la situación que se vive en la ciudad condal, el líder de Meliá reconoce abiertamente que “el cambio en la alcaldía se va a notar, sin lugar a duda, en materia de seguridad, que es fundamental para la atracción turística”. “Barcelona tiene que liderar una buena imagen de seguridad”, remarca.

Sobre el aeropuerto de El Prat, Escarrer defiende que, “salvaguardando la protección del medioambiente, no tiene sentido negarnos a su ampliación”. “Sin transporte no hay turismo”, enfatiza (El Gobierno, decidido a desbloquear la ampliación de El Prat).

El hotelero también ha opinado sobre la polémica de los cruceros. Entiende que “debe haber una mayor planificación, porque si no se crea una sensación de masificación y pérdida de identidad, y ese es el turismo que no queremos”.