Hoteles vacacionales tientan a fondos de inversión y family offices de Asia

Los fondos de inversión, los ‘family offices’ y las cadenas hoteleras de Asia, especialmente de China, se están fijando últimamente en un tipo de activo que no era su objetivo habitual: los hoteles vacacionales de costas e islas de España. En concreto, estos inversores se fijan en “hoteles de cuatro estrellas que sean operados por empresas de cierto reconocimiento local o vinculadas a un touroperador de prestigio. Quieren el mínimo riesgo”, han señalado a preferente.com fuentes conocedoras de los movimientos existentes.

Quienes están al tanto de las peticiones que se han recibido para hablar sobre posibles inversiones no descartan que las cadenas hoteleras asiáticas estén simplemente “estudiando el mercado” en lugares como Mallorca y la costa de Cataluña y la Comunidad Valenciana.

En cuanto a los fondos y ‘family offices’ orientales, señalan que “no saben de turismo pero sí que es un buen sector para invertir”, lo que también puede verse como algo “interesante para los operadores de aquí”. Hay operaciones concretas que se han cerrado recientemente, como la del grupo chino GPRO que ha comprado el hotel Valparaíso de Palma (Grupotel) y tiene interés por otros en la isla mediterránea.

En las Islas Baleares, expertos consultados observan incluso un “pequeño despertar”, donde los family offices están relevando parcialmente a los touroperadores como inversores hoteleros, ante la parálisis de las cadenas en este sentido.

Después de un tiempo en que los mayoristas turísticos se han posicionado con fuerza en los destinos isleños, los grandes patrimonios privados están virando su foco desde el sector inmobiliario al turístico, donde buscan firmar contratos de renta a siete u ocho años entregando la gestión a operadores especializados.

En cualquier caso, la tendencia creciente en el segmento vacacional español, cuentan las mismas fuentes, es “ceder en alquiler con renta fija, lo que supone un riesgo para el operador”. Se espera el aterrizaje de más marcas hoteleras internacionales en estos establecimientos, aunque se reconoce que, en muchos casos, “el encaje es difícil”.