Las recientes sanciones impuestas a establecimientos hoteleros y propietarios de viviendas turísticas por solicitar una foto del DNI al huésped por WhatsApp antes de llegar al alojamiento, lanzan un serio aviso a aquellas empresas que opten por esta práctica (Multa de 30.000 euros a un hotel por escanear el pasaporte de un turista).
En los últimos días, ha trascendido a la opinión pública el caso de una persona que se negó a enviar su documentación por la vía solicitada, pese a ser considerada condición necesaria para realizar un supuesto check in. Según informa El Confidencial, tras denunciar ante la Guardia Civil, el propietario del apartamento fue sancionado al pago de 2.000 euros por vulnerar el Reglamento General de Protección de Datos.
La AEPD consideró que ese requisito “no es necesario para la finalidad para la que se recaba”, ya que los datos personales deben ser “adecuados, pertinentes y limitados a lo necesario en relación con los fines para los que son tratados”.
Las sanciones pueden alcanzar hasta los 100.000 euros en función de la gravedad. Por ejemplo, la empresa Marketing Accommodation Solutions FZ, que cuenta con pisos en Airbnb, tuvo que hacer frente al pago de 75.000 euros, por solicitar fotos del DNI por ambas caras a sus huéspedes, además de un “selfie con sus caras”.
Asimismo, un hotel fue multado con 30.000 euros por archivar copias de los documentos de los clientes y hacer uso de ellos para verificar su identidad en algunos servicios. En este caso, la Agencia Española de Protección de Datos determinó que “no incluía ningún detalle sobre la recogida y utilización de la fotografía”.
En resumen, Samuel Parra, abogado especialista en protección de datos, avisa de que “si te obligan a enviar un DNI por WhatsApp habiendo otros medios, como enseñarlo físicamente, se está cometiendo una ilegalidad”. Los alojamientos “solo tienen que coger el DNI, apuntar esos datos y comunicarlos a la Policía. O bien escanearlos a través de una app que envíe los datos estrictamente necesarios”.
El pais se va a la mierda y los burroa le siguen