Destrozar el mobiliario del hotel, desobedecer al personal del establecimiento o saltar de un balcón a otro. Estos son algunos de los motivos que provocan la expulsión inmediata de turistas poco cívicos de los hoteles de Magaluf (Mallorca) en los que se alojan.
De hecho, según el portavoz de la asociación hotelera de dicha zona, Joan Espina, cada vez que se producen estos incidentes se remite una circular a la asociación “para que no vuelvan a la zona”.
“Aquí hay 24.000 camas y sería relativamente fácil para ellos encontrar alojamiento. Lo que queremos es que se vayan de la zona”, asegura Espina a mallorcadiario.com. Según el portavoz de los hoteleros de Magaluf esta forma de actuar ante casos de incivismo lo llevan aplicando desde hace cinco años.
Los precios bajos atraen "hooligans" y/o gamberros.
A los TTOO les importa poco que una zona se degrade, hay muchos resorts en el mundo, sin embargo el establecimiento hotelero se queda anclado en su sitio.
Las autoridades estatales, regionales, provinciales y locales deben "mojarse" yendo de la mano con los hoteleros.
Algo se puede y se debe hacer.