El consumo energético aumenta y las grandes hoteleras españolas toman medidas al respecto para intentar reducir el consumo en sus hoteles. Meliá, NH y Barceló son tres de las grandes cadenas que se han puesto manos a la obra y han ideado diversos proyectos de eficiencia energética para disminuir este problema medioambiental.
Meliá
La cadena mallorquina ha conseguido reducir el consumo por estancia un 14% en los últimos seis años con respecto al mismo espacio de tiempo anterior. Sin embargo, la cadena ha aumentado el consumo y la factura eléctrica, pasando de 59 millones de euros en 2015 a los 64 millones de euros en 2018, debido al aumento de hoteles y habitaciones de la hotelera.
El grupo ha instalado 22.500 LEDs y 3.500 equipos electrónicos en estos últimos años, consiguiendo un ahorro de 12% en el consumo eléctrico por estancia. Además, ha eliminado el plástico de un solo uso en los hoteles Esta iniciativa conlleva la eliminación de botellas, vasos y posavasos, bolsas para uso en habitaciones, pajitas de plástico, y su sustitución por productos alternativos biodegradables y ecológicos.
La compañía también ha acercado este compromiso a los clientes, reforzando la comunicación con mensajes claros de concienciación (Meliá, Riu, Iberostar y Bahía Príncipe coinciden en despedirse del plástico de un solo uso).
NH
La cadena pretende intensificar su plan de eficiencia energética, después de tener un ascenso global de su consumo energético. Ha pasado de los 546.000 MWh de 2017 a 563.000 MWh según los datos de su memoria corporativa de 2018.
Para reducir el consumo, la cadena realizará cambios de equipos, cuyo reemplazo supone una eficiencia mayor: bombas, minibares, trenes de lavado, climatizadores, calderas, enfriadoras… Además de inversiones relacionadas con el control de las instalaciones: sistemas de gestión energética de edificios, actualización de contadores, mejoras en la iluminación… Y, por último, actuaciones en las fachadas de los inmuebles que suponen mejoras de la envolvente y en el aislamiento.
Barceló
El Grupo Barceló también llevará a cabo una serie de medidas para reducir el consumo, según indica la propia compañía en su informe integrado de 2018. Entre ellas destaca la sustitución de prácticamente todas las bombillas de incandescencia y halógenos de los hoteles por iluminación LED, que se implementará en aproximadamente un 85% de los hoteles de la compañía, con una inversión estimada de más de 2,3 millones de euros.
También desarrollará la instalación de sensores de movimiento de activación de luz, temporizadores y medidas de automatización para el encendido de la luz y el aire acondicionado, tanto en habitaciones como en zonas comunes.
Asimismo, llevará a cabo una sustitución de combustibles como el diésel o propano por gas natural. Por otro parte, pretender realizar una optimización de torres de refrigeración y sistemas de climatización o instalación de equipos de climatización más eficientes, que supondrá una inversión estimada de más de 5 millones de euros, según informa Merca2.
Preferente.com Diario para profesionales del Turismo