La ciudad que asiste a su peor momento hotelero, Madrid, no deja de seguir creciendo en número de plazas. A las recientemente abiertas (Only You, Suecia, etc) y a las anunciadas a corto plazo (Indigo), se suman varios establecimientos más en la Plaza de España, por un lado, y en la Castellana (Bernabeu), por otro.
Hay interés de inversores nacionales e internacionales por seguir apostando a toda costa por la hotelería urbana madrileña. El caso más reciente es el del presidente de la emisora Kiss FM, Blas Herrero, quien ya llevaba años detrás de participar en este negocio, tal como le anunció en repetidas ocasiones al presidente de Globalia.
Una apuesta que no deja de sorprender a los observadores imparciales y ajenos por completo a los movimientos empresariales o especulativos. El negocio hotelero en Madrid no funciona y en algunos casos es asfixiante. Las principales cadenas urbanas están con el agua al cuello por las ocupaciones en la capital del Reino.
El problema hotelero de Madrid lo achacan los empresarios, los profesionales y los representantes de las patronales a la desidia de los organismos oficiales, tanto el Ayuntamiento como la Comunidad. Otros opinan que es debido al derrumbe de las operaciones de la compañía Iberia en la T4 de Barajas.
La crisis del consumo y el AVE han influido de igual manera en la bajada de la rentabilidad de los hoteles madrileños, incluso diría que más. Ha sido, pues, una suma de factores lo que ha perfilado un panorama que en algunos casos es dramático. No es consuelo que otras grandes ciudades estén pasando por la misma coyuntura.
¿Hay perspectivas favorables de negocio en Madrid para que a medio y largo plazo se abran más hoteles, más miles de camas como los proyectados de forma inminente? Ningún indicador señala que lo haya. Más bien todo lo contrario tras perder la capital de España el tren de los Juegos Olímpicos de 2020.
Más hoteles en una ciudad saturada de establecimientos solo augura peores rendimientos para los implantados, ya de por sí con resultados a la baja. No hay que ser un lince para llegar a esta conclusión. El aterrizaje de Four Seasons es una buena noticia, pero los hoteles de lujo sufren aún más que los de menor categoría.
Hará falta algo más que un gigantesco plan de choque de la autoridades madrileñas, tal como solicitan los hoteleros, que se miran en Turismo de Barcelona, no sin razón, para relanzar un destino que por diferentes motivos es a día de hoy muy magro en cuanto a rentabilidades y que no ve la luz al final del túnel de la crisis.
Mientras tanto, en Barcelona diversas voces han vuelto a sacar el fantasma de una hipotética burbuja hotelera, informa El País, pues la oferta mantiene un ritmo de crecimiento importante desde hace años y sumará en breve nuevas aperturas como la del hotel de Hyatt en la Torre Agbar o el posible Four Seasons en la sede de Deutsche Bank.
Algunos hoteleros temen que caiga la ocupación y la tarifa media si sigue creciendo la planta, pero el Gremi d’Hotels de Barcelona se opone a la limitación de nuevas licencias en Ciutat Vella, que tiene el 30% de las plazas de la ciudad. El Paseo de Gracia y sus aledaños están copando buena parte de las nuevas inversiones, que están reconvirtiendo edificios de oficinas en hoteles.
No solo la desidia de la administración , Ayuntamiento y Comunidad de Madrid,ademas su inoperancia e incomptencia para legislar y combatir la multitud de oferta ilegal que existe, apartamentos que no cumplen con ningún requisito conforme al decreto, y que ademas no pagan ningún impuesto, no tienen trabajadores cotizando, y así un largo etc....
Este es el respeto que se tiene al empresariado hotelero madrileño, y que no se hace respetar porque es cómplice con la administración.
No hay idea de futuro turístico , de planeamiento equilibrado, esto se ha convertido en una selva, y el valor de las palabras, compromiso y responsabilidad ha desaparecido.
¡Ay Madrí, Madrí! ¡Quien te ha visto y quien te ví!
Desde mi perspectiva, que trabajo en un hotel urbano, no sólo lo que nos esta ahogando son los alojamientos ilegales, que nos quitan clientes y reducen nuestro margen de operatividad; sino también el propio gobierno, que cada vez nos lo pone difícil, y también la crisis económica que se nota en casi todos los sectores, aunque algunos no quieran verlo. En nuestro caso algunos clientes que antes se alojaba de lunes a sábado, por ejemplo solo se alojan martes a jueves por ahorrar y por que sus empresas no les dan para mas, por que no tienen; y en otros casos hemos tenido que empezar a cobrar por adelantado por que muchas personas se alojan y luego no pagan; o la empresa que contrato quebró y te deja con deudas, que dependiendo del hotel que sea se puede asumir o no. También nos afecta la instabilidad de los precios que esta en cambio constante tanto por la competitividad del sector, como por promociones, ofertas y descuentos. Si los grandes bajan el precio, los pequeños se ven en la disyuntiva necesaria de bajar. En fin lo que necesitamos es mas apoyo al sector con leyes que favorezcan el desempeño de nuestra actividad y no la entorpezcan con leyes que parecen mas a favor de los que están en lo ilegal, que a los que estamos en la legalidad.
si invierten esas enormes cantidades de dinero es que algo saben que ninguno de los que escriben aquí, incluido este medio, saben ...tal vez estén tomando posiciones, recordemos que en la época de las vacas gordas el problema en Madrid era que las grandes enseñas de la hostelería de lujo no encontraban edificios grandes en zonas prime para acoger sus negocios. Ahora esos edificios no abundan, pero estan a buen precio.
desde que esta el ave, mi empresa, me envía una vez a la semana a primera hora del día y me hace volver a barcelona en el último ave, los miembrosw de mi empresa no hacemos noche en Madrid.