El 2022 será un gran año para las grandes hoteleras españolas. La gran demanda latente, el auge de las reservas y la subida de las tarifas que se viene produciendo en los últimos meses, ha provocado que la mayoría de ellas esperen cerrar el ejercicio en positivo, muy cerca, o incluso por encima de los datos de 2019. (Meliá, Riu, NH y Piñero rozan o igualan cifras precrisis)
Según cuenta Expansión, Meliá prevé que el segmento vacacional supere las cifras previas a la pandemia, mientras que el urbano apenas quedará un 10% por debajo. La compañía considera que alcanzará un Ebitda superior a los 400 millones de euros. Asimismo, impulsará su tesorería con la venta de activos y con la apertura de 40 nuevos hoteles en lo que queda de año.
Por su parte, Riu pretende seguir la línea positiva que ya experimentó en el 2021, cuando olvidó las pérdidas y cerró el año con unas ventas brutas de 1.375 millones de euros. Como publicó Preferente, la hotelera prevé despedir el periodo estival con una media de ocupación por encima del 85% y un incremento medio de las tarifas de entre un 5% y 10%, lo que, sin duda, insuflará oxígeno a su economía.
Mismo optimismo se respira en Barceló. Pese a las graves pérdidas que mantuvieron el año pasado, su CEO para Europa, Oriente Medio y África, Raúl González, asegura que se dejarán atrás las situaciones "dramáticas" y reinarán las buenas noticias. Según el citado medio, anticipa un Ebitda consolidado de aproximadamente 200 millones para 2022, con un beneficio neto consolidado positivo de 48,4 millones.
Finalmente, desde NH Hotels siguen centrando su operativa en el negocio urbano. La compañía ya factura más que antes de la pandemia, y su consejero delegado, Ramón Aragonés, subrayaba recientemente que “vamos a acabar 2022 con beneficio neto, y con todos las ratios de la compañía por encima de lo que habíamos previsto al principio de año”.
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