Riu, Barceló e Iberostar: reinversión de sus cientos de millones de beneficios

Riu anunció este lunes que prevé invertir 2.500 millones de euros de aquí hasta 2022 en el marco de su plan de inversión, de esta cantidad 650 millones ya este año. Se suma así a los ambiciosos planes del Grupo Iberostar, que también la pasada semana anunció una inversión de 700 millones para los próximos cinco años, y a los de Grupo Barceló, que tiene una capacidad de financiación de más de 1.200 millones de euros para oportunidades de compra en el sector para impulsar su crecimiento.

Riu, Barceló e Iberostar sacan músculo así antes del arranque de Fitur, a los que a falta de conocer sus datos se les unirá Meliá, y hacen público a qué van a destinar los enormes beneficios cosechados en los últimos años al calor de las temporadas récord en España y El Caribe, y el grueso de esta liquidez va a ir a parar a reinvertir en sus propias hoteleras, para seguir creciendo por todo el mundo, y para mejorar los productos que ya tienen.

Riu, de su lado, durante este año que acaba de comenzar, tiene previsto construir cuatro nuevos hoteles y realizar cinco reformas, recordando que otro de "los objetivos estratégicos de Riu es crecer en destinos vacacionales de Asia", a la par que como Iberostar relanza un cambio de imagen de marca (Riu también renueva su marca).

El Grupo Iberostar, de su lado, anunció que invertirá, en los próximos cinco años, 700 millones de euros en nuevos proyectos en destinos como México, Cuba Perú, Aruba, Santo Domingo, Montenegro o Ibiza y Mallorca, en España, según anunció este jueves su vicepresidenta y consejera delegada, Sabina Fluxá (Iberostar crea un nuevo segmento para sus hoteles con historia).

Barceló, por su parte, tras rechazar NH su oferta de fusión, quiere crecer y está interesada en hacerlo con compras, y tiene una capacidad de financiación de más de 1.200 millones de euros para afrontar oportunidades de compra en el sector para impulsar su crecimiento, ya que prevé cerrar 2018 superando con holgura los 400 millones de euros de ebitda (Barceló podría destinar hasta 1.200 millones en compras).

Así, las grandes cadenas vacacionales del mundo siguen confiando en el sector turístico, pues en vez de diversificar sus inversiones en otras industrias, están optando destinar los ingentes beneficios cosechados estos años al sector al que le ven más futuro: el suyo.