Room Mate está trabajando para refinanciar su deuda hasta 2018 y, tras abandonar la idea de ampliar capital, se está preparando para realizar una emisión de deuda en el MARF (Mercado Alternativo de Renta Fija) con el que captar al menos 10 millones de euros con los que devolver a Sandra Ortega, dueña del 30% de la cadena, una inyección de fondos por esa cantidad realizada en 2014 tras extinguir su crédito.
Los socios de la hotelera de Kike Sarasola se han comprometido a reintegrar el dinero a la hija del dueño de Inditex. Los pasos dados hasta ahora para salir al mercado de bonos han sido la transformación de la compañía en una sociedad anónima (S.A.) y el sondeo de posibles inversores para esta operación.
El año pasado, cuenta Expansión, Room Mate refinanció su deuda y saneó su balance con una operación ‘acordeón’, figura que se utiliza cuando una empresa tiene pérdidas y su patrimonio se sitúa por debajo del mínimo exigido por ley, de modo que se encuentra en situación de disolución obligatoria.
Tras reducir a cero su capital social y ampliarlo luego en 60.000 euros, ha logrado salvar la situación, previa prima de asunción de 4’3 millones. El accionariado se ha mantenido estable: 43% de Kike Sarasola (a través de Tafay 2000), 30% de Sandra Ortega (mediante Rosp Corunna), 14% de Basohon Investment, 6% de Berbaz Familiar, 4% de Ergocrático y 3% de Gorka Atorrasagasti.
Y lo alucinante es que siguen abriendo hoteles y le dan premios continuamente.
Más de diez años de existencia y todavía sin generar beneficio neto. Desconozco quien invertirá en estos bonos pero si la accionista de referencia replega velas, por algo será. Los bancos cerraron el grifo y para recuperar la deuda extendieron vencimientos, los accionistas no ponen ni un euro mas, no hay inversores dispuestos a entrar en el accionariado y ahora se intenta ir al mercado de deuda. No creo que la coloquen en su totalidad y lo de abrir hoteles queda muy bonito pero por cada uno que se abre se cierra otro.