Grandes expectativas por parte del sector hotelero de cara a la temporada de verano. La Alianza Hotelera, que representa a más de una veintena de cadenas, prevé que la mayoría de los establecimientos cuelguen el cartel de completo durante los meses de junio y agosto. (Llenazo hotelero en Semana Santa pese a la inflación)
Se pondría el broche de oro a una tendencia muy positiva que se viene observando desde Semana Santa, periodo en el que se registró una ocupación media del 85%, con picos de hasta el 98%. Asimismo, cabe destacar que, para este mes de junio, ya se han asegurado el 78% de las reservas, un dato que mejorará gracias al “last minute”.
Concretamente, la Alianza espera un crecimiento del turismo en ciudades, con gran atractivo turístico como Barcelona, Sevilla y Madrid. El mercado estadounidense se perfila como el de mayor incremento, superando a grandes emisores como Francia, Reino Unido y Alemania. En el ámbito europeo, se espera una mayor afluencia de visitantes procedentes de Francia.
Estas cifras hacen ver la demanda se mantiene sólida pese a la inflación y a la convocatoria de elecciones en julio. El secretario del Consejo de la Alianza Hotelera, Fernando Gallardo, ha destacado que, “a pesar del retraimiento inicial en la demanda tras el anuncio de las elecciones generales, podemos asegurar que este evento no afecta en absoluto las previsiones de reservas para el verano”.
Como punto negativo, se prevé que ninguna de las 22 cadenas hoteleras de la Alianza verá una mejora en sus resultados en comparación con el año 2019. “Los altos costos operativos, impulsados por la inflación y el aumento de los precios energéticos, absorberán los beneficios generados por el incremento en las tarifas”, concluye Gallardo.
Esta claro que la democracia neo liberal permite abusar del cliente cuando la demanda excede a la oferta o se limita la oferta para equilibrar demanda y oferta. Por lo que vemos esto esta pasando ahora mismo.