Definitivamente, Venecia cobra la entrada a los visitantes. Desde este fin de semana, en los días de gran concentración, quienes quieran visitarla y no se vayan a alojar en la ciudad deberán abonar 5 euros (Finalmente, desde el 25 de abril Venecia cobrará la entrada).
Tras varios años de pruebas y aplazamientos, sobre todo debido a la pandemia de Covid, finalmente el municipio ha comenzado a cobrar por entrar. Se paga descargando un código QR que puede ser solicitado por las autoridades en cualquier momento. No tenerlo supone multas de al menos diez veces el precio de la entrada.
La medida, sin embargo, ha provocado incluso una pequeña manifestación de vecinos que creen que esto no sirve para nada y dará una pésima imagen de la ciudad que definitivamente será vista como un parque temático. Protestan porque este dinero no servirá para arreglar los verdaderos problemas, entre ellos el peor es el alquiler vacacional que ha disparado el precio de vivir en la ciudad. Desde hace pocos días, la oferta de Airbnb y similares supera el número de plazas de alojamiento para los pocos vecinos que aún siguen en la ciudad.
La entrada no se cobra todos los días sino cuando hay más presencia de visitantes, sobre todo los fines de semana, por supuesto muy populares.
Este fin de semana, en la piazza Roma, donde llegan los coches, o delante de la estación de trenes, empleados municipales informaban a los visitantes de la obligación de pagar por entrar a la ciudad.
Igual que la ecotasa, otro impuesto más, no se sabe en qué se ha gastado la recaudación pero se intuye, otro fracaso más para el ciudadano de a pie
Estos impuestos no sirven absolutamente para nada. ¿Al final piensan que por cobrar va a dejar de ir la gente ?. Pues no. Si lo quieres cortar de raíz, pon coto al número diario de personas y se acabó el problema que quieres mitigar. Pero claro esto no creo que sea legal. Es como la tasa a los hidrocarburos que se les imputa a las compañías aéreas. ¿Creen que por esta tasa se va a contaminar menos?. Pues no. ¿Quién lo termina pagando?. El consumidor. Pero señores todo esto está maquinado y pensado por políticos, en su mayoría personas de muy baja formación, por no decir ninguna, personas que se apuntaron en su día a las juventudes de sus partidos y han vivido sin dar un palo al agua en su vida. Personas que han hecho una carrera, y quizás un doctorado como nuestro “querido presidente o expresidente”, y no saben lo que es trabajar. Yo quiero que la persona que maneje mi país sea una persona con un caché, con prestigio refutado, con un currículum, como por poner un ejemplo el señor Pablo Isla. Un tipo del que nadie puede dudar de su valía, una persona con unos conocimientos y una experiencia de sobra para conducir un país. Porque un país es al fin y al cabo una gran empresa. Pero no, nos dirigen políticos que lo único que saben hacer es hablar, y no todos, y rodearse de ciento de asesores para sacar adelante su escasa valía. No hay solución, seguiremos pagando impuestos a destajo sin que nadie ponga coto a esta malversación por parte de los políticos. Vivan, disfruten y defrauden lo que puedan porque al final se lo sacarán y robarán por otro lado.