Ha vuelto Jordi Clos a la presidencia del Gremio de Hoteleros de Barcelona y no se ha mordido la lengua con las autoridades de la capital catalana a la hora de defender al sector turístico y, particularmente, a la actividad hotelera. Clos, empresario comedido y culto, retorna al puesto tras un breve periodo de Jordi Mestre como líder de la asociación , que abandona tras la venta de sus hoteles (Jordi Clos vuelve a presidir el Gremi d’Hotels de Barcelona tras vender Mestre su cadena).
Jordi Clos ha sido claro y rotundo en una amplia entrevista concedida a El Periódico de Cataluña, especialmente en lo que al consistorio presidido por la alcaldesa Ada Colau se refiere. “No puede ser que se rechace a una cadena de lujo como Four Seasons”, señala. Y con relación al turismo de calidad demanda “limpieza, civismo y urbanismo”. También recalca que hay problemas con la gestión.
“Los problemas de gestión vienen de antes del coronavirus. Seremos capital de la arquitectura, ¿pero qué ciudad vamos a mostrar al mundo? No basta con cuatro edificios icónicos: necesitamos una ciudad ordenada, atractiva...Fuimos muy estrictos con las exigencias del paisaje urbano en la etapa de Maragall, pues estuvimos entre las mejores ciudades, y ya no. Hay problemas claros de gestión que hay solucionar”, enfatiza el hotelero catalán.
En cuanto a lo que espera del Govern, pide “que sea consecuente con lo que representa el turismo para Cataluña, que se ponga las pilas y que vea que todo esto es un problema más grande que otros que intentan solucionar”. Clos no se olvida de los pisos turísticos ilegales ni de los resultados de los últimos meses "que no son buenos porque los precios son muy bajos".
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