La Comisión Europea admite "preocupaciones" por las colas en los controles de seguridad que se están registrando en aeropuertos de la UE como los de Barcelona y Madrid (El caos en el control de pasaportes en El Prat también aflige a Barajas) pero insiste en que "es el precio a pagar por la seguridad". Además, ha recordado que los Estados miembro deben desplegar suficientes recursos y personal para garantizar que los controles sean "lo más fluidos" como sea posible.
La portavoz del Ejecutivo comunitario, Mina Andreeva, destaca que "las normas que tenemos están claramente ahí para proteger la seguridad d nuestros ciudadanos. Más controles pueden llevar a más retrasos y este es el precio a pagar por la seguridad".
La portavoz ha insistido en que no se puede pedir por un lado "tener más controles, aumentar la seguridad y al mismo tiempo tener quejas por periodos de espera más largo". "Lo uno es el precio de lo otro", insiste.
"Todos los Estados miembro querían tener las normas actuales", ha recalcado la portavoz, que ha recordado que las nuevas normas fueron aprobadas por los países después de que éstos reclamaran en octubre de 2015 a la Comisión Europea presentar una propuesta.
Desde el Ejecutivo comunitario, no obstante, entienden las "preocupaciones" por estos retrasos y ha recordado que los Estados miembro "necesitan garantizar el despliegue suficiente de recursos y también de personal a fin de hacer que estos controles sean lo más fluidos como sea posible", ha aclarado Andreeva, que ha insistido en que los países han tenido tiempo para prepararse para la entrada en vigor de la normativa.
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