La UE analiza las ayudas públicas a los aeropuertos españoles

La privatización de los aeropuertos de Madrid-Barajas y de Barcelona-El Prat supondrá un nuevo escenario en el que las ayudas económicas públicas a Aena Aeropuertos S.A. de forma “generalizada e indiscriminada” podrían crear “distorsiones al funcionamiento eficiente de dicha gestión”. Además, interferiría en la competencia que “puede ir existiendo” entre diferentes aeropuertos españoles, según el Informe Anual sobre Ayudas Públicas de la Comisión Nacional de la Competencia (CNC), al que ha tenido acceso preferente.com.

La CNC recuerda que Aena está en proceso de ceder la gestión de los aeródromos de Madrid y Barcelona, que las comunidades autónomas “pueden ver reforzada su presencia” y que el gestor aeroportuario estatal se plantea la posibilidad de crear sociedades filiales para gestionar “bloques de aeropuertos de manera independiente”.

Preocupación en la UE

La Comisión Europea, ante este mapa de cambios en España, ha expresado su “preocupación creciente” por las subvenciones públicas, de las que dice no tener “conocimiento directo”. En su informe, Competencia señala que el motivo por el cual el Estado español no ha comunicado ala Unión Europea la concesión de estas cantidades podría ser que no se las considera “ayudas públicas”.

Por ello, la CE abrió la pasada primavera un proceso de consulta pública para revisar las Directrices sobre ayudas a aeropuertos y rutas aéreas, de cara a estudiar una posible reforma de la Comunicación actualmente vigente, que data de 2005. ha abierto ya investigaciones formales “relativas a determinadas ayudas al sector, y muy particular a través de convenios publicitarios” concedidas a los aeropuertos de Marsella (Francia), Frankfurt-Hans y Leipzig-Halle (Alemania), Irlanda y Timisoara (Rumanía). Se sospecha que se ha podido producir “sobrecompensación” económica en los contratos publicitarios suscritos por estos aeropuertos.

Las ayudas en España

 Entre 2007 y 2011, 16 aeropuertos de España se beneficiaron de fondos públicos por campañas publicitarias y de promoción turística. Entre los 13 que no obtuvieron ayudas “ni directa ni indirectamente”, se encuentran los que de menor tráfico de pasajeros, aunque curiosamente también el aeropuerto de Barcelona-El Prat.

Competencia ha indicado que entre 2007 y abril de 2001, se suscribieron 124 acuerdos publicitarios entre entes públicos autonómicos y aerolíneas en España, con una evolución creciente de los fondos públicos que “no se corresponde con un incremento del número de pasajeros y a la inversa, la reducción de los mismos

tampoco se ha correspondido con un descenso del número de pasajeros”.

Paralelamente, la CNCconsidera que “en un número importante de supuestos no ha existido una correcta adecuación a los principios de publicidad y concurrencia” y que la finalidad de muchos de estos acuerdos “es subvencionar la presencia de las aerolíneas en determinadas rutas” y no el objetivo inicialmente declarado, que es la promoción turística de un destino. Competencia ha puntualizado que se estaría “otorgando una ventaja económica” a los aeropuertos y aerolíneas beneficiarios de las ayudas, que “tiene implicaciones desde el punto de vista del cumplimiento de las previsiones del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea en relación con las ayudas de Estado y de las Directrices que desarrollan las ayudas a la puesta en marcha de aeropuertos regionales”.

La CNC ha basado su informe en los datos aportados por Turespaña, las comunidades autónomas con aeropuerto y las compañías aéreas operativas en España que tuvieron más de cinco millones de pasajeros en 2010: Iberia, Ryanair, Air Europa, Spanair, Air Nostrum, Vueling, easyJet y Air Berlin.