La Audiencia de Las Palmas ha impuesto penas de cárcel a seis de los diez guardias civiles que exigían mordidas en el Aeropuerto de Gran Canaria a cambio de no contar el dinero en efectivo de los pasajeros procedentes de África.
Los agentes de Unidad Fiscal del Aeropuerto de Gran Canaria, instaban a los pasajeros extranjeros a que les entregaran "dinero o parte de la mercancía introducida sin controlar" a cambio de "falsear la declaración de movimientos de pago" o de "no fiscalizar la mercancía que se trataba de introducir".
Según La Provincia los principales acusados han sido condenados a ocho años y medio de cárcel por los delitos continuados de cohecho y de falsedad en documento oficial, mientras que las penas acordadas para el resto de agentes oscilan entre los cinco años de prisión y una multa de 140 euros.
En el fallo judicial, el magistrado sostiene que los agentes causaron un "daño evidente" porque "debían contar el dinero de forma efectiva y no meramente aproximativa". Los funcionarios estaban obligados a "verificar de forma efectiva el dinero", es decir, "contar billete a billete" lo declarado por los pasajeros.
Todos los agentes están inhabilitados para ejercer un cargo público y han sido expulsados de la Guardia Civil por ejecutar un "plan preconcebido" para "lucrarse indebidamente" mediante la "exigencia y obtención" de un beneficio económico, según la sentencia de la Audiencia de Las Palmas. Algunos se quedaron con mordidas de hasta 1.500 euros, otros reclamaban 50 euros "para café".
La sentencia, que es susceptible de recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), fundamenta la condena en el testimonio de una funcionaria de la Agencia Tributaria adscrita al aeropuerto. Además los pasajeros que han admito los pagos y la veracidad de las imágenes grabadas por una cámara oculta.
Preferente.com Diario para profesionales del Turismo