Un centenar de turistas pasa la noche en el aeropuerto de Las Palmas de Gran Canaria por el fallo de un radar en Portugal. La plena temporada alta, con una tasa de ocupación del 95% y en pleno carnaval de Maspalomas, fue casi imposible alojar a los 720 pasajeros afectados.
La caótica situación se resolvió a medias y es que tan solo 16 habitaciones (32 camas) fueron las plazas que se destinaron a los afectados, especialmente familias con bebés, hijos pequeños y personas con discapacidad.
Como alternativa, el aeropuerto de Gando, en Gran canaria, sirvió de alojamiento a cientos de pasajeros. De esos 700, quedaron 100 pasajeros que se quedaron sin alternativa. A pesar de que se habrían encontrado habitaciones, al no haber plazas para todos, muchos decidieron pasar la noche en la Terminal. El aeropuerto les facilitó comida y mantas para pasar la noche de la manera más confortable posible.
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